El segundo Gran Derbi de la temporada se quedó sin dueño. El Sevilla-Real Betis disputado en el Ramón Sánchez Pizjuán se cerró con un empate a cero en un partido en el que los locales tuvieron más ocasiones pero no fueron capaces de anotar. El ambientazo en la previa no estuvo a la altura de lo que luego se vio sobre el césped.
El cómputo global de los derbis se queda en empate este año. Algo que es un alivio para los más conservadores y una pena para los más optimistas. En cualquier caso, ningún club sevillano ha podido esta campaña con su más eterno rival cuando se han visto las caras. Hubo un 1-1 en el de la primera vuelta del campeonato y se empató a cero en el de la vuelta de LaLiga Santander.
El encuentro se vivió más fuera que dentro del campo. Los dos equipos llegaron muy lastrados por las alturas de la temporada en la que nos encontramos. El Sevilla pagó el peaje de haber disputado la semifinal de la Europa League este pasado jueves. El Betis también dejó muchas muestras de cansancio. El miedo a perder fue latente por parte de los dos equipos.
El partido fue aburrido en la primera parte y algo más divertido en la segunda mitad, sobre todo tras los cambios que hicieron ambos entrenadores.
El Sevilla es el que se marcha de este encuentro con peor sabor de boca. Los locales tuvieron muchas más ocasiones que su rival. Dispararon a puerta cuatro veces y Dmitrovic no recibió ningún disparo entre los tres palos. El conjunto sevillista estuvo especialmente desacertado, sobre todo en los últimos metros de campo.
Los de Mendilibar fueron de más a menos. El equipo notó mucho las rotaciones que hizo el entrenador en el once inicial. La entrada de Rafa Mir, Papu Gómez, Óliver Torres y Gonzalo Montiel apenas aportó nada a un equipo que estuvo espeso y lento cerca de la portería de su rival.
El entrenador tardó demasiado tiempo en hacer los cambios y en mover un poco a sus jugadores. Estos cambios le cambiaron la cara al partido y al Sevilla. En la segunda mitad de la segunda parte los locales encerraron a su rival en su propia portería. El gol no se dio pero dio la sensación de que el conjunto sevillista fue el que más mereció y el que se quedó muy cerca de llevarse los tres puntos. Tres puntos que hubieran metido al equipo nervionense en los puestos europeos.
El Betis se jugaba mucho en lo deportivo y en lo sentimental. Podría haber asaltado el feudo del eterno rival y haber logrado la clasificación matemática para la Europa League por tercera vez en su historia de forma consecutiva. Igual con este empate sigue siendo cuestión de tiempo que este objetivo se certifique.
El conjunto verdiblanco no pudo estar cómodo en ningún momento del partido. No pudo generar ocasiones de peligro y cerró el choque sin disparos a portería de su rival.
En el primer tiempo no estuvo mal, pero con los cambios del Sevilla fue claramente superado. Juan Miranda le dio muchas alas a los locales tras su expulsión. El canterano apenas estuvo siete minutos sobre el césped cuando hizo una entrada criminal sobre Navas y fue expulsado. El canterano se vuelve a ver superado por un partido importante.
En los compases finales el Betis se vio obligado a llevar a cabo un ejercicio de supervivencia en su propio campo. Con un futbolista menos y con un Sevilla volcado, la plantilla se limitó a achicar agua.
El Gran Derbi se queda sin dueño. Un resultado que no convence a nadie pero que visto el contexto del partido, puede ser bueno para los intereses de los dos clubes sevillanos.
Ficha técnica:
Sevilla FC: Dmitrovic; Gonzalo Montiel (Jesús Navas 82”), Karim Rekik, Gudelj, Alex Telles (Marcos Acuña 82”); Rakitic, Pape Gueye; Erik Lamela, Óliver Torres (Suso 50”), Papu Gómez (Bryan Gil 71”) y Rafa Mir (Youssef En Nesyri 71”).
Real Betis: Claudio Bravo; Sabaly, Germán Pezzella, Luiz Felipe, Abner (Juan Miranda 80”); Guido Rodríguez, William Carvalho (Paul Akoukou 71”); Luiz Henrique (Rodri 45”), Sergio Canales (Joaquín 80”), Ayoze Pérez y Borja Iglesias (Juanmi 65”).
Árbitro: Jesús Gil Manzano. Por parte de los locales fueron amonestados Gonzalo Montiel y Karim Rekik. Por parte de los visitantes Luiz Henrique y Paul Akoukou. Juan Miranda fue expulsado.
Incidencias: Partido disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante 41.392 espectadores.