La Policía china ha matado a primera hora de este lunes a ocho personas en la provincia de Xinjiang (oeste) en lo que ha descrito como un "ataque terrorista" en el condado de Yarkand.
El Gobierno provincial ha confirmado a través de un comunicado oficial que el incidente ha tenido lugar cerca de la localidad de Kashgar, uno de los núcleos principales de la ruta de la seda y situada cerca de la actual frontera con Tayikistán.
"Alrededor de las 6.30 horas (las 23.30 horas del domingo en la España peninsular), nueve matones que portaban cuchillos atacaron una comisaría, lanzando explosivos e incendiando varios vehículos", ha indicado.
"La Policía tomó medidas decisivas, matando a ocho de ellos y capturando a otro", ha resaltado el Gobierno provincial, que ha subrayado que se trata de un "violento acto terrorista" que ha de ser investigado.
Este mismo mes, la Policía mató a catorce personas durante unos disturbios en la localidad de Kashgar en los que fallecieron también dos agentes. En noviembre, nueve civiles y dos policías murieron cuando un grupo de personas armadas con hachas y cuchillos atacaron una comisaría cerca de dicha ciudad.
Xinjiang es una zona de continuas tensiones debido a que allí se concentra la población uigur --de mayoría musulmana-- y, según han denunciado varias organizaciones humanitarias, las autoridades chinas están intentando introducir a la etnia han --la más numerosa en el resto del país-- en una especie de limpieza étnica.
El último gran conflicto tuvo lugar en el verano de 2009, cuando al menos 200 personas murieron por los enfrentamientos entre uigures, chinos han y fuerzas de seguridad. Las autoridades lo atribuyeron a conflictos entre comunidades.