La Guardia Civil ha imputado un presunto delito de lesiones por imprudencia al conductor del autobús escolar siniestrado este martes entre las localidades de Dos Aguas y Buñol (Valencia), según han informado a Europa Press fuentes del instituto armado.
El accidente se produjo este martes por la mañana cuando el vehículo se salió de la vía, se despeñó en la CV-580, en sentido Buñol, y cayó a una distancia de entre 20 y 30 metros.
Un total de 11 personas --10 de ellas menores-- continuaban ingresadas en la tarde del martes en diversos centros hospitalarios valencianos. En el Hospital de Manises permanecían dos menores con pronóstico leve; mientras que en el Hospital General de Valencia quedaba ingresado un adulto con traumatismos. Además, en el Hospital La Fe de Valencia había ingresados dos menores con traumatismos y cinco menores leves, y en el Hospital Clínico, un menor con traumatismos.
El autobús siniestrado viajaba entre las localidades de Dos Aguas y Buñol cuando sufrió un accidente al salirse de la vía a la altura del kilómetro 63,5 de la CV-580, en sentido Buñol, y caer una distancia de entre 20 y 30 metros. La llamada al teléfono de emergencias 112 Comunitat Valenciana entró a las 07.12 horas y, seguidamente, se ha movilizado la Guardia Civil, ambulancias, Consorcio de Bomberos de Valencia y Policía Local.
21 ALUMNOS DE ESO Y BACHILLERATO
En total, en el autobús viajaban 21 alumnos de primero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) a segundo de Bachillerato de Dos Aguas y Millares, que se dirigían al instituto de Buñol, según la Generalitat.
El autobús era del año 2008 y había pasado la ITV hacía tres semanas, el día 12 de febrero de 2014. Contaba con todas las medidas en materia de seguridad y los asientos iban equipados de cinturón de seguridad. Asimismo, destacó que el conductor conocía la ruta perfectamente, dado que la hacía todos los días. Era el conductor habitual que realizaba esta ruta escolar entre Dos Aguas y Buñol.