La Guardia Civil ha localizado en la aduana de Melilla a un inmigrante irregular oculto en el interior de una maleta y ha detenido al portador de la misma, un ciudadano de nacionalidad marroquí con residencia en nuestro país.
Los hechos ocurrieron en la aduana de Beni-Enzar, al apreciar los guardias civiles que prestan servicio de vigilancia fiscal que una persona accedía a pie procedente de Marruecos portando una maleta de grandes dimensiones que despertó sus sospechas, explicó la Guardia Civil en un comunicado.
Esta persona arrastraba la maleta con gran dificultad, apreciando además los agentes que el peso de la misma estaba mal distribuido. Al ser reclamado este individuo para la identificación e inspección de dicha maleta, este continuó su camino sin hacer caso a los agentes en su requerimiento, e intentando huir de forma veloz hacia la ciudad de Melilla, dejando la maleta allí abandonada. Tras una breve persecución a la carrera, los agentes consiguieron darle alcance, reducirlo y detenerlo.
Tras la apertura de la maleta, en presencia de su portador y ante la sorpresa de los agentes se pudo comprobar que en su interior iba oculta una persona de origen subsahariano, que pudo salir de la maleta por sus propios medios.
La persona que se ocultaba era un joven de 19 años de edad, de procedencia subsahariana, indocumentado, que dijo proceder de Mali, y que ha sido puesto a disposición judicial en calidad de testigo y al que posteriormente se le aplicará la vigente Ley de Extranjería.
La persona que portaba la maleta es un ciudadano de nacionalidad marroquí con residencia legal en la provincia de Lleida, cuyas iniciales son N.N. de 39 años de edad, que en calidad de detenido ha pasado también a disposición judicial como presunto autor de un delito contra los ciudadanos extranjeros, por tráfico de personas o de inmigrantes.