Asimismo, el Pleno ha constatado de forma unánime que el gran drama de esta crisis es la destrucción de empleo: tras cada parado, hay un drama personal. Este efecto, que está incidiendo además en buena parte sobre el colectivo inmigrante, hace más que imprescindible la necesidad de intensificar los esfuerzos encaminados a mantener la paz social. En este contexto, la Cámara, si bien ha realizado un análisis sectorial, se ha centrado principalmente en un plano más general para definir una serie de medidas y propuestas, que a modo de recetas, son de aplicación en dos vertientes: en el ámbito empresarial y en el ámbito de las Administraciones.
La conclusión, ha sido la conveniencia de “trasladar a las Administraciones la gran necesidad de oxígeno existente”, a través de 25 propuestas dirigidos a las empresas y a las Administraciones para afrontar esta coyuntura económica.