En 2017, la compañía aérea Ryanair anunció la construcción de un centro (dos hangares) para labores de reparación y mantenimiento (MRO, en sus siglas en inglés) de aviones en San Pablo. La inversión anunciada, que finalmente se quedó en Sevilla aunque también la peleó el país vecino de Portugal, rondaba los ocho millones de euros y traía aparejada una creación de empleo de en torno a 140 puestos de trabajo relacionados con el sector aeronáutico. La superficie entonces reservada era de 8.000 metros cuadrados. La compañía explicó tras la firma del acuerdo (abril de 2017) que las instalaciones tendrían capacidad para la reparación de dos aeronaves.

Tan sólo dos años después y como consecuencia del crecimiento exponencial de la oferta de vuelos en el aeródromo sevillano, la aerolínea mantuvo un encuentro antes de las elecciones municipales del pasado mes de mayo con el alcalde de La Rinconada, municipio propietario de los suelos que pretende Ryanair, para trasladarle su intención de ampliar las instalaciones de su ITV de aviones, según confirmaron fuentes municipales.

Ambas partes se emplazaron para el próximo mes de septiembre, momento en el que la empresa presentará su propuesta concreta al Ayuntamiento. Pero a grandes rasgos, ésta supondrá pasar de los 8.000 metros cuadrados y los dos hangares actuales a 16.000 metros cuadrados, duplicando el número de hangares para tener así capacidad para reparar cuatro aviones al mismo tiempo.

Una vez Ryanair presente sus necesidades concretas, ambas partes concretarán también puestos de trabajo que se generarán y los plazos de ejecución, así como la licencia de obra, apostillaron las fuentes consultadas.

Ryanair es una de las aerolíneas que más rutas ofrece en el aeropuerto de San Pablo, que mes tras mes bate sus propias marcas. Rozan la cuarenta de destinos tanto nacionales como internacionales, según los últimos datos disponibles. Una de esas rutas internacionales que se sumará será Budapest.

Futuro próximo: los 10 millones de pasajeros

La compañía Aena va a invertir en el aeropuerto de San Pablo hasta el año 2021 un montante de 62 millones de euros para adaptar sus instalaciones a una realidad para la que no queda mucho: el aeródromo sevillano pasará de los 6,4 millones de pasajeros de 2018 a atender diez millones de viajeros anuales una vez finalizada la ampliación.