El presidente del grupo europeo Airbus, Tom Enders, aseguró hoy que el accidente del avión de transporte militar A400M en Sevilla en mayo no afecta ni a los pedidos realizados ni a las ventas potenciales.
Enders, en una entrevista a la emisora francesa "Europe 1", también insistió en que las autoridades españolas levantarán "pronto" las restricciones de vuelo a los A400M que están en diferentes fases de producción en la planta de Sevilla para que puedan reanudarse las entregas.
En concreto, dijo que "(confía) en que la aviación española hará pronto lo mismo" que han hecho los británicos y los turcos, que vuelven a volar con sus A400M, tras haberlos dejadosen tierra unos días tras el siniestro del 9 de mayo en Sevilla, cuando murieron cuatro empleados de Airbus en un vuelo de prueba del aparato.
Además, hizo notar que el Ejército francés en ningún momento había dejado de operar con sus A400M.
"Hemos entendido bien las causas de este accidente trágico. Hemos sabido tomar las medidas que se imponían", argumentó el responsable ejecutivo de la compañía.
El Gobierno español, por boca del secretario de Estado de Defensa, Pedro Argüelles, justificó que no se hayan levantado las restricciones al vuelo de los aviones A400M porque la prioridad es aclarar las causas del accidente de Sevilla, garantizar la seguridad y para que el programa de este aparato "recupere cuanto antes la credibilidad internacional".
Argüelles, que ayer estuvo visitando el Salón Aeronáutico de Le Bourget, insistió a Efe en que "la prioridad en este momento es identificar exactamente las causas que produjeron el accidente, identificar las medidas que se deben adoptar para que no vuelva a ocurrir. Eso pasa por delante del ritmo de las entregas. La seguridad es lo primero."
Airbus, que ha seguido realizando vuelos con sus A400M de pruebas, considera que una vez que se hicieron verificaciones en todos los aviones entregados de que no se daba el problema que se sospecha que motivó el siniestro -una carga defectuosa del programa que gestiona los motores- ya no hay razones para que las aeronaves sigan obligadas a permanecer en tierra.
Enders señaló que durante el Salón de Le Bourget esta semana están comprobando "la confianza" de los clientes del A400M, y que el fabricante aeronáutico "asumirá sus responsabilidades" por un accidente "absolutamente trágico".
Y a la pregunta de si hay pedidos amenazados, respondió que lo ocurrido en Sevilla "no ha tenido ninguna consecuencia sobre nuestros encargos porque Los países que tienen el A400M saben que este es un aparato extraordinario".
También negó que se hayan visto afectadas las posibles exportaciones del avión militar e indicó que se está informando "a nuestros clientes potenciales de exportación de las medidas que hemos tomado después de este accidente".
Contó que en Le Bourget mantienen discusiones para vender el A400M a "un cierto número de países (...) de diferentes partes del mundo" y aunque no quiso dar nombres habló del interés de algunos países de Oriente Medio y de Asia.
"Las perspectivas son bastante buenas y esperamos poder firmar un contrato en un futuro próximo", dijo antes de puntualizar que las ventas militares no se cierran con la misma rapidez que las de aviones comerciales.