El ministro español de Cultura en funciones, José Guirao, anunció este lunes en la Unesco la intención de presentar una candidatura junto con Portugal
El ministro español de Cultura en funciones, José Guirao, anunció este lunes en la Unesco la intención de presentar una candidatura junto con Portugal para que la primera vuelta al mundo, iniciada por Fernando de Magallanes y finalizada por Juan Sebastián Elcano, sea Patrimonio de la Humanidad.
Como no hay vestigios materiales, salvo lo existente en los archivos, el objetivo de ambos Gobiernos es que se incluya dentro de la categoría de "Memoria del Mundo".
La expedición buscaba descubrir nuevas rutas hacia Oriente. Partió en 1519 desde Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) comandada por el navegante portugués Magallanes, que falleció en 1521, y finalizó tres años después capitaneada por el español Elcano.
Guirao señaló en su intervención en París, en la 40 sesión de la Conferencia General de la Unesco, que Madrid y Lisboa quieren que "se reconozca la importancia de esta gesta para la humanidad por su impacto educativo, científico y cultural".
Los dos países quieren involucrar a otras naciones incluidas en esa ruta, como Brasil o Chile, y pretenden que la candidatura, cuyo expediente está en proceso, pueda ser aprobada antes de 2021, fecha simbólica de finalización de ese viaje 500 años después.
Guirao presentó además en la Conferencia General la candidatura española para formar parte del Consejo Intergubernamental del Programa Hidrológico Internacional.
El país está avalado, a su juicio, por su "amplia experiencia en gestión de recursos hídricos y la colaboración prestada a la Unesco para la formación en esta materia".
España tiene 49 reservas de la biosfera y gestiona 15 geoparques, lo que la sitúa respectivamente en primera y segunda posición a nivel mundial, y según Guirao su compromiso en la defensa del patrimonio natural se manifiesta también con la organización en diciembre en Madrid de la cumbre del clima (COP25).
Su intervención sirvió también para reiterar la importancia de que la cultura se incluya de forma más explícita en la Agenda 2030, ya que no tiene un objetivo específico de desarrollo sostenible en la misma.
La idea, según explicó a la prensa, es que la cultura "no quede solo como un mensaje o discurso de fondo", sino que las referencias existentes se traduzcan en programas y proyectos concretos que los países puedan desarrollar.
Su agenda en la capital francesa incluyó una reunión con la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay.
Guirao le renovó en ese encuentro el compromiso de desarrollar el Centro de Arte Rupestre de la Unesco, concedido al país hace años pero paralizado hasta hace poco por falta de recursos.
"Hemos dicho que mientras se arregla una sede definitiva, que hay que acordar con alguna comunidad autónoma, vamos a desarrollarlo en sede propia (en el Instituto de Patrimonio Histórico del Ministerio) para no pararlo. Y cuando se arregle la definitiva, nos trasladamos, porque donde estaba el atasco precisamente era en encontrar dónde lo ponemos", concluyó.