Alrededor de un centenar de embarcaciones de cerco de puertos onubenses y gaditanos han retomado hoy la actividad después de dos meses y medio de parada y lo hacen pudiendo pescar boquerón, su captura más rentable, algo que no ocurría desde el 1 de septiembre de 2011.
El regreso a la actividad se ha retrasado 15 días, ya que aunque el fin de la parada biológica anual estaba programada para el 4 de febrero, las discrepancias entre la flota -puertos onubenses y Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), por un lado, y Barbate (Cádiz) por otro- en el reparto de la captura del boquerón no han posibilitado la reapertura del caladero hasta hoy.
Regresan a la mar, según han explicado a Efe desde el sector, con "muchas expectativas y ganas", ante el estado en el que podrá encontrarse el caladero, que calculan debe de ser bastante bueno a tenor del tiempo de parada, y porque "la necesidad obligaba de obtener recursos para comer y vivir" a volver al trabajo.
Precisamente, ha sido esta necesidad la que imperó y posibilitó que el sector se pusiera de acuerdo la semana pasada y consensuara un reparto de cuotas del boquerón para 2013 de forma que el Gobierno haya decidido levantar el cierre del caladero que decretó el pasado 2 de febrero, coincidiendo con el fin de la parada biológica, hasta que se llegara a un acuerdo.
Desde la Secretaría General de Pesca, consciente de los problemas que se registraron el pasado año cuando en agosto ya se había consumido toda la cuota autorizada, lo que motivó el cierre del caladero a la captura del boquerón a partir del 1 de septiembre, consideraba necesario alcanzar ese consenso para evitar este año episodios como este.
Las posturas estaban enfrentadas, los puertos de Huelva y Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), que representan el 80 por ciento del sector apostaban por un reparto de cuotas lineal; Barbate (Cádiz), 20 por ciento, por un reparto en base a criterios históricos.
Parecía que el acuerdo no iba a ser posible, sin embargo, el jueves, después de nueve horas de negociación con la Secretaría General de Pesca como mediadora, se lograron consensuar posturas y aplicar un criterio mixto que dejó a todos más o menos satisfechos.
Las 4.726 toneladas se han repartido de forma que Barbate se lleva un 43 %, Sanlúcar de Barrameda un 15 %; Isla Cristina un 18 % y Punta Umbría un 24 %.
Se establece un control trimestral de las capturas por parte de la Inspección Pesquera, al margen del control a través de las distintas asociaciones y cofradías en los puertos que será los que repartan por cada embarcación.