La presunta implicación de la concejal María José Valencia en el fiasco del Plan Bahía Competitiva de Cádiz puede conllevar, además de su cese en los cargos que hasta la fecha mantenía en el Ayuntamiento de Sanlúcar - otra serie de consecuencias en el equipo de Gobierno, que mantiene su mayoría de voto gracias a la alianza entre los concejales de PSOE (10) y CIS (3), que les permite obtener la mayoría ‘justa’ para sacar adelante su gestión.
De prosperar su imputación en el caso, las salidas que se le plantean a Valencia son escasas, toda vez que el PSOE intentará recuperar el acta de concejal para mantener su mayoría en el plenario.
Por un lado, cabría esperar su suspensión como militante socialista hasta que se celebrara el juicio. A partir de ahí sería la edil la que deberá decidir, llegado el caso, qué hacer con su acta de concejal, si mantenerla o renunciar a ella y abandonar la política hasta que se aclare el caso. De continuar como concejal, debería ceñirse a la disciplina de voto del PSOE o bien abandonar el grupo municipal socialista para pasar al mixto, lo que haría tambalear la mayoría del Gobierno municipal y tener que recurrir a pactos puntuales con otras fuerzas políticas para poder sacar adelante la gestión municipal.
