Ya está en la calle. El Carnaval, claro. Lo otro tiene que esperar un poco. El Chupinazo de la Peña Los Pollitos mi compare abrió oficialmente la fiesta en la plaza del Rey, sede oficial de las carnestolendas por voluntad y gracia del Ayuntamiento de San Fernando.
Y allí, sobre el escenario, tuvieron lugar los primeros reconocimientos, los de las peñas, a personas que han destacado por una cosa u otra.
Para empezar, la Peña Carnavalesca Los Pollitos le entregó la Llave de Oro del Carnaval a David Hernández El Lejía, que subió blanco impacable al escenario.
La Peña Perete entregó la Careta de Oro a Manuel Ortega Marín, El Moro y a Antonio Cepero Gómez y la Peña Los Catavinos inauguró la Gran Quesada Popular con el consabido cambio de Quesero Mayor.
Quien lo fue el año pasado, José Manuel Porras, le entregó el testigo, el atuendo al comunicador gastronómico Pepe Oneto, quien tras partir el primer queso se lo dedicó a su esposa, fallecida hace cuatro meses. Pero la vida sigue. Y hubo más todavía.
La Peña Con sabor a cañaílla entregó la Cañaílla de Oro a José Cortés Aragón, mientras que en el recinto de la plaza del Rey todo el mundo comenzaba la pitanza para escoger, porque cada peña tiene su especialidad.
Eran los prolegómenos, aunque antes, en el castillo San Romualdo, tuvo lugar la recepción oficial de la alcaldesa, Patricia Cavada, a las que más tarde serían proclamadas Colombinas y a los pregoneros, los cantantes Andy y Lucas.
Unos minutos después de las ocho de la tarde, en el Parque Almirante Laulhé -único escenario que se va a utilizar porque todos los actos son en el centro de la ciudad y éste no cabía- comenzó la noche con la proclamación de las Colombinas. La Colombina Mayor, María Romero Mateo y su corte de honor, dando comienzo así el acto oficiado por el periodista Antonio Campos.
Luego subirían al escenario la alcaldesa, Patricia Cavada y al delegada de Fiestas, Mar Suárez, para hacer entrega del Pierrot de Oro a José Betanzos Bernal y el Pierrot de Plata a José Clares Blanco.
Ya con todos en el patio de butacas -de sillas en este caso- y ante un auditorio absolutamente lleno y con los árboles iluminados por la luminotecnia del equipo de montaron los Andy y Lucas, se anunció el Pregón del Carnaval de San Fernando.
Dos almirantes con tajes negros y camisas blancas, los dos cantantes, subieron al escenario y sobre el atril se presentaron, le dijeron piropos a La Isla y le demostraron ese cariño haciendo lo que mejor saben hacer.
Lucas al piano, los dos gaditanos cantaron una canción especialmente compuesta para la ocasión y para la ciudad, y también contaron con la participación de quien mejor recuerda a José Monje Cruz, Camarón de la Isla. Su amigo Paquito de La Isla que cantó por bulerías por eso de que este es el Año Camarón, y aunque no lo parezca, lo irá pareciendo poco a poco.
Andy y Lucas volvieron a cantar acordándose de Marta del Castillo, la joven asesinada en Sevilla cuyo cuerpo no aparece y terminaron la canción enseñando una camiseta con la leyenda Todos somos Marta, aunque antes actuó una comparsa -la del compadre Andrés de Lucas- como preludio de lo que venía después.
Lo que no se sabía el día antes se sabía en la mañana del Pregón. De nuevo un primer premio del Falla en La Isla. Los irracionales, de Bienvenido. Era la primera vez que cantaba tras ganar el concurso y no se notó que apenas habían dormido unas horas. Y despertaron al público. Monísima la muchacha.
