La tercera conferencia internacional sobre el contrabando de animales se clausuró hoy con la Declaración de Hanoi, que recoge el compromiso escrito de los participantes a combatir a los cazadores furtivos y a los contrabandistas.
"El comercio ilícito de vida silvestre está aumentando el riesgo de extinción de muchas especies terrestres y acuáticas, tanto amenazadas como protegidas, y la sobreexplotación de otras", advierte el documento.
Por ello, "son necesarios enfoques amplios y bien coordinados en toda la cadena de suministro", estipulan los firmantes.
Quedan en el mundo entre 420.000 y 650.000 elefantes africanos salvajes y entre 40.000 y 50.000 elefantes asiáticos salvajes, según estimaciones de la organización Traffic.
La población mundial de tigres salvajes ronda los 3.890 ejemplares, de acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
La Declaración de Hanoi contiene el compromiso de los participantes a mejorar la cooperación internacional tanto en las leyes que protegen la vida silvestre como en la lucha contra la corrupción "a todos los niveles".
Asimismo, promete "reducir significativamente la demanda de vida silvestre comercializada ilegalmente en los mercados de consumidores e internet con el fin de abordar eficazmente la caza furtiva y el contrabando".
Etiopía se compromete a eliminar el tráfico ilegal en general y el de elefantes en particular; Camerún reforzará la protección de los pangolines; Indonesia elaborará un estudio completo desde la caza al comercio ilícito de animales en su territorio; y Birmania (Myanmar) averiguará cómo se mueven y por dónde los furtivos y contrabandistas en su demarcación.
Vietnam proseguirá durante 2017 su campaña de información ciudadana, lo mismo que los Emiratos Árabes Unidos.
Francia destinará 942.000 euros (997.560 dólares), hasta 2018, para un programa de Traffic y WWF Vietnam dirigido a reducir a la mitad la demanda de cuernos de rinoceronte en territorio vietnamita para el año 2020.
Estados Unidos lanzará el proyecto "Wildlife Asia" en el Sudeste Asiático con un fondo de 23 millones de dólares (21,7 millones de euros), que se centrará en sus inicios en "reducir la demanda de marfil de elefantes, pangolines, cuernos de rinocerontes y productos de los tigres".
EEUU destinará otros nueve millones de dólares (8,5 millones de euros) para combatir el tráfico ilegal de vida silvestre en Vietnam.
Alemania, Australia, Botsuana, Canadá, China, Filipinas, Holanda, Malawi, Mongolia, Mozambique, Namibia, Reino Unido, Sudáfrica, Togo, Uganda y la Unión Europea también cooperarán en la lucha contra el contrabando de animales, así como la Interpol, el Banco Mundial y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
La próxima edición de esta conferencia internacional sobre el contrabando de animales se celebrará en Londres en 2018.