El candidato republicano, Mitt Romney, ha señalado que no quiere "ir por el camino de España" en materia de gasto público, en el primero de los tres debates que se celebrarán antes de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, previstas para el 6 de noviembre.
"España gasta el 42 por ciento de su economía en gastos gubernamentales", subrayó el candidato republicano ante Obama. "Yo no quiero ir por el camino de España, quiero ir por la vía de crear empleos en este país", ha dicho, en la parte del debate electoral correspondiente al déficit público.
El primer cara a cara entre Romney y el presidente estadounidense, Barack Obama, que aspira a la reelección, se ha celebrado en la Universidad de Denver. Obama ha abierto el debate con el bloque de política fiscal, acusando a Romney de querer bajar los impuestos a las clases altas y subirlos a las clases medias y ha explicado que "no es posible" que Romney consiga cuadrar el déficit, tal y como pretende, reduciendo los impuestos a las clases altas y aumentando el gasto militar "a no ser que lo haga cargando sobre las clases medias". "Es aritmética", ha dicho.
"Yo tengo una opinión diferente", ha subrayado. "Creo en un nuevo patriotismo que dice que cuando a Estados Unidos le va mejor cuando a las clases medias les va mejor", ha sostenido.
Romney, por su parte, ha negado las acusaciones del candidato demócrata. "Yo no tengo un plan para reducir masivamente los impuestos y, por tanto, los ingresos del Gobierno", ha aseverado. "De hecho, mi principio número uno es que no puede haber reducciones de impuestos que aumenten el déficit", ha indicado.
El ex gobernador ha explicado que su objetivo es "reducir los impuestos que están pagando los ingresos medios". "Y eso no puedo hacerlo reduciendo los impuestos que pagan las clases altas", ha añadido, aunque ha matizado: "tenemos que reducir los impuestos tanto para las grandes empresas como para las personas".