Bajo el lema "El antiprohibicionismo por una cuestión de clase - Reparación por necesidad", la manifestación comenzó en la Avenida Paulista
Cientos de brasileños participaron este sábado en la Marcha de la Marihuana de Sao Paulo para exigir el "fin de la guerra a las drogas", en medio de la expectativa por la reanudación de un juicio en la Corte Suprema que puede despenalizar su tenencia para consumo personal.
Bajo el lema "El antiprohibicionismo por una cuestión de clase - Reparación por necesidad", la manifestación comenzó en la Avenida Paulista y recorrió las calles de la mayor ciudad de Brasil hasta terminar en su centro histórico en un ambiente festivo.
"Estamos aquí hoy no solo para poner fin a la guerra contra las drogas, sino también para poner fin a una política prohibicionista en general", afirmó a EFE una de las organizadores de la marcha que se identificó como Diva Sativa, de 28 años.
En la protesta, que este año celebró su decimoquinta edición en la capital paulista, también participaron movimientos feministas, indígenas, así como colectivos LGTBI.
"Creemos que como usuarios organizados vamos a conseguir una transformación", indicó Diva Sativa, entre gritos como "la guerra a las drogas mata pobres todos los días" de los manifestantes.
La concentración se produce en vísperas de que la Corte Suprema reanude un proceso que puede despenalizar la tenencia de drogas para su consumo personal.
Está previsto que ese juicio se retome el próximo miércoles en el alto tribunal.
El caso comenzó a ser analizado en la máxima instancia judicial del país en 2015, cuando fue suspendido a petición de uno de los magistrados de la corte.
En la acción se pide la inconstitucionalidad del artículo 28 de la llamada "Ley de Drogas" de 2006, que penaliza "adquirir, guardar, transportar o cargar consigo drogas para consumo personal", a partir del caso de una persona que fue condenada por poseer tres gramos de marihuana mientras estaba detenida.
Un fallo favorable del Supremo sentaría jurisprudencia y podría desembocar en una revisión de sentencias impuestas por casos similares.
Sin embargo, Diva Sativa no cree que una eventual decisión del Supremo "vaya a cambiar tanto" la vida de los consumidores de marihuana.
"Despenalizar es un primer paso y Brasil ya está bien atrasado" en ese punto, indicó.
Ella considera más necesario cambiar la Ley de Drogas mediante la "presión popular".
"La ley de 2006 es buena en la teoría porque diferencia entre usuarios y traficantes, pero en la práctica encarceló" a miles de personas, jóvenes, negros, mujeres, de la periferia, opinó.