Brasil, uno de los países más castigados por la pandemia en el mundo, registró en las últimas 24 horas 74.134 nuevos contagios de covid-19, con lo que el promedio de infecciones por día volvió a los niveles de junio de 2021, cuando el país vivió uno de los peores momentos de la crisis sanitaria.
De acuerdo con los datos divulgados este lunes por el Consejo Nacional de Secretarías de Salud (Conass) e impulsada por la rápida propagación de la variante ómicron, la media de contagios en Brasil se multiplicó por 24 en los últimos 25 días, desde 3.090 casos por día el 23 de diciembre hasta 73.728 infecciones diarias este lunes.
El promedio de este lunes, el mayor en casi siete meses, prácticamente alcanzó el del 23 de junio del año pasado, cuando Brasil, en el pico de la segunda ola de la pandemia, registró una media récord semanal de 77.328 contagios por día.
Es decir que la rápida propagación de la ómicron, una variante más contagiosa y que ya es predominante en el país, con más del 90 % de los nuevos casos, hizo que en menos de un mes el país perdiera todo el rumbo de mitigación de la pandemia que había conseguido en seis meses gracias al avance de la campaña de vacunación.
Según el boletín divulgado este lunes por el Conass, Brasil registró en las últimas 24 horas 121 muertes y 74.134 casos de coronavirus, que elevan hasta 621.166 el total de víctimas y hasta 23.074.791 el de contagios desde el inicio de la pandemia, en febrero de 2020.
Estas cifras acumuladas confirman a Brasil como el segundo país en número de óbitos por covid en el mundo después de Estados Unidos y como el tercero en cantidad de infecciones tras la nación norteamericana e India.
El número de muertes también creció en los últimos días impulsado por la rápida propagación de la ómicron, pero en menores proporciones.
El promedio de víctimas se ubicó este lunes en 154 diarias, con un crecimiento del 22,2 % con respecto al de hace una semana (126 óbitos por día el 10 de enero) y del 60,4 % en comparación con el de dos semanas atrás (96 muertes diarias el 3 de enero).
La media de muertes por covid en Brasil de hoy es la mayor desde la registrada el 13 de diciembre pasado (162 fallecimientos diarios).
Antes de la llegada de la ómicron, Brasil había conseguido reducir los números de muertes y de casos por covid a sus mínimos en 20 meses, ya que en diciembre pasado las cifras estaban casi en los mismos niveles que en el inicio de la pandemia.
Esa reducción fue atribuida al avance de la campaña de la vacunación, que permitió que hasta este lunes cerca de 147,7 millones de brasileños, el 69,4 % de los 213 millones de habitantes del país, cuenten con el ciclo completo de inmunización (dos dosis o la vacuna de dosis única).
Brasil tiene a cerca del 70 % de su población con la inmunización completa precisamente cuando se conmemora un año de la primera vacuna.
La fecha, además, coincidió con el inicio de la vacunación para los niños de entre 5 y 11 años, autorizada por las autoridades sanitarias hace un mes pero que comenzó con atraso debido a la resistencia del Gobierno del presidente Jair Bolsonaro, que se opone a la inmunización de los menores y ha dicho que no permitirá que su hija sea vacunada.
Esa resistencia contrasta con la opinión mayoritaria del país. Según un sondeo divulgado hoy por el instituto Datafolha, casi el 80 % de los brasileños respalda la vacunación infantil y un 58 % cree que el jefe de Estado está dificultándola.