El Rincón Fertilidad de Málaga cayó ayer por 27-28 en el partido liguero adelantado que las enfrentó el Granollers en el Pérez Canca. El gol catalán fue el primero en subir al luminoso ante los inciertos ataques de las malagueñas. Solo Alice Fernandes evitó que el mal inicio fuera todavía peor en el marcador.
Rocío Campigli empató desde los siete metros tras una buena jugada de Sole López. No tardó el conjunto visitante en ponerse por delante, las pérdidas lastraron a las locales. Llegaron los golpes en ambos lados del campo de la mano de una gran Esperanza López.
La guardameta visitante, Nicole Wiggins, evitaba la igualada local, haciéndose grande bajo los palos. El Granollers anotaba con facilidad para tener una cómoda diferencia de cuatro goles que provocó el tiempo muerto de Suso Gallardo.
Pero la dinámica siguió igual y las visitantes sacaron petróleo en cada uno de sus ataques. Las malagueñas, nerviosas y con poca precisión, tenían dificultades para anotar. Bajó el ritmo el conjunto catalán, con la cómoda ventaja con la que lideraba el encuentro, durante los últimos cinco minutos de la primera parte, que acabó con el 11-15 en el marcador.
La segunda mitad comenzó con lo que parecía la misma dinámica de los anteriores treinta minutos pero el Rincón Fertilidad de Málaga reaccionó y pasaron de la máxima ventaja visitante (+6) al 18-19.
Las jugadoras de Suso Gallardo no aprovecharon la posesión para el empate y, de nuevo, cogieron aire las catalanas para poner el colchón de los cuatro goles de ventaja ante un pabellón donde empujaba la afición para que las locales volvieran a acercarse en el luminoso, aunque una muy acertada Ona Vegué fue la encargada de darle aire a las visitantes.
A falta de cuatro minutos las malagueñas lograron el empate a 25. La tensión se intensificó en la cancha y el Granollers, desde los 7 metros, sumó para ponerse otra vez por delante. El palo impidió la sentencia catalana para cerrar el triunfo y llevarse los dos puntos y, de nuevo, se asomaron las tablas a falta de un minuto en el Pérez Canca.
Treinta segundos y tiempo muerto de Robert Cuesta. Fue cuando se desató la locura y llegaron dos tantos, en cada una de las porterías, para, finalmente, sentenciar el encuentro un gol de Vegué desde los siete metros, ya sin tiempo, para darle los dos puntos al conjunto catalán que empata en la tabla liguera con las malagueñas.
