Unicaja volvió a vivir una noche mágica de Euroliga en casa ante el Fenerbahce Dogus, llevándose la victoria por un punto (68-67) este jueves.
Regresaba el Carpena a la máxima competición continental y se vestía con sus mejores galas. El infierno verde volvía a ser el sexto jugador sobre el parqué, en el que Adam Waczynski se estrenó con un triple y Giorgi Shermadini adornaba con un tapón en los primeros compases.
Luigi Datome y Jason Thompson, que ganaba la partida a Shermadini, ajustaban el marcador con sendas canastas (6-4). Sacó la varita mágica Nedovic a pase de Ray McCallum para sumar a aro pasado.
Jan Vesely ganaba el duelo a Carlos Suárez e igualaba el luminoso mediado el primer cuarto (8-8). Brad Wanamaker puso por delante al Fenerbahce desde la línea de tres y Datome seguía a lo suyo.
Era Shermadini quien arañaba un nuevo 2+1 bajo el aro turco, mientras que Jeff Brooks acercaba a los malagueños con un triple y Dragan Milosavljevic ponía por delante a los locales. James Nunnally y Sasu Salin cerraron el periodo igualando a 20.
Sloukas adelantaba a los visitante en el segundo cuarto. La batalla en la zona era dura y la máquina cajista no sacaba partido de sus ataques. Se iba el Fenerbahce y Joan Plaza paró la contienda con un tiempo muerto.
El atasco anotador malagueño marcaba la diferencia en el luminoso, al que aportaban Nedovic y unos brillantes minutos de Dejan Musli (31-37). Le costaba fallar al equipo de Obradovic que aguantaba los envites cajistas a golpe de triples. Waczynski se subía al carro. Al descanso, 36 a 41.
Remontada
Vesely y Alberto Díaz aportaban en el inicio del tercer cuarto cuya dinámica anotadora seguía favoreciendo a los turcos (38-45). Parecía engrasarse el ataque local, pero una técnica a Nedovic desequilibró de nuevo. El aro empequeñecía para los de Plaza y el colchón de 10 puntos pesaba en el marcador, donde Suárez y Salin recortaron (50-57).
McCallum lideró a los cajistas en el inicio del último cuarto encendiendo a la afición; Augustine puso por delante a Unicaja (60-57) y de pie al Carpena.
La tensión era máxima sobre un eléctrico parqué sobre el que los locales ponía el corazón para aumentar la ventaja (68-60). Reaccionaron los turcos liderados por Sloukas que lo rozaron en el último segundo. Pero sería otra noche mágica de Euroliga en el Carpena para Unicaja.