El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, se ha mostrado "absolutamente convencido" de que la actuación del Ayuntamiento en el cierre cautelar de un pub situado en la avenida de Príes, tras la queja del hermano de la concejala de los distritos Centro y Teatinos, Gemma del Corral, y socio del hotel colindante, ha sido "correctísima".
"Tengo la seguridad de que el Ayuntamiento en este tema, como en todos por el excesivo ruido, actúa con corrección total y exquisita", ha manifestado este martes a los periodistas, reiterando que "no tengo la menor duda de que el expediente se ha llevado con absoluta corrección".
En cualquier caso, ante la denuncia presentada ante la Fiscalía por los responsables de la discoteca por un posible tráfico de influencias, De la Torre ha señalado que "estamos en un Estado de Derecho y los tribunales verán".
La discoteca, cuyo cierre cautelar fue decretado por el Área de Medio Ambiente el pasado mes de noviembre, superaba en 22 el número de decibelios máximos permitidos, lo que, según ha informado el concejal responsable, Raúl Jiménez, suponía uno de los casos "más flagrantes" de contaminación acústica a un colindante que se ha detectado hasta ahora en Málaga.
A la orden de cierre cautelar, de obligada aplicación según la legislación vigente cuando existen infracciones graves --más de tres decibelios de superación--, se suma, además, la incoación de un expediente sancionador por infracción muy grave, que podría finalizar con la imposición de una multa de entre 12.001 y 30.000 euros.
EXPEDIENTE TAMBIÉN AL HOTEL COLINDANTE
El concejal ha explicado que los técnicos de su área han expedientado también al hotel que linda con la discoteca por incumplir arquitectónicamente con los requisitos de aislamiento acústico, al carecer de muro medianero en la planta bajo cubierta, por lo que comparte este espacio con la discoteca adyacente.
En este caso, y dado que las exigencias de aislamiento son menores en un hotel --al menos 40 decibelios-- respecto a las de un local dedicado a discoteca --75 como mínimo--, la sanción por la infracción cometida se encuadra en la categoría de grave, con una horquilla económica de 601 euros a 12.000 euros.
Los problemas de contaminación acústica relacionados con la discoteca se remontan al mes de septiembre de 2012, con la presentación de una primera denuncia vecinal por exceso de ruido, debido a la apertura de puertas y ventanas y a la instalación de altavoces y aparatos de televisión en la terraza, según Jiménez.
Esta denuncia fue objeto de indagación por parte de la Policía Local, que constató, tras personarse en el lugar de los hechos, que la discoteca tenía las puertas y ventanas cerradas en el momento de la inspección, por lo que no se inició ningún trámite administrativo posterior, salvo el traslado de este informe al Defensor del Ciudadano, que se había interesado también por el problema.
Jiménez ha advertido sobre la necesidad de distinguir entre dos tipos de ruido muy diferentes: el producido en la vía pública por las personas que se desplazan de un local a otro o permanecen en el exterior de él, y la contaminación acústica por inmisión de ruido en los edificios o viviendas colindantes de establecimientos con música, por un exceso de volumen de sus equipos de reproducción o un insuficiente nivel de aislamiento.
Según el edil del PP, el local dedicado a discoteca permanece en la actualidad cerrado por circunstancias ajenas a la orden cautelar del Área de Medio Ambiente, añadiendo que en el momento en que los responsables de la explotación aporten la documentación requerida y confirmen mediante proyecto técnico la adopción de medidas para mejorar el aislamiento acústico, hasta un mínimo de 75 decibelios, podrían retomar la actividad.
TRAMITACIÓN HABITUAL
Por último, Jiménez ha añadido que ninguno de estos dos expedientes administrativos ha sido tramitado de forma acelerada ni se ha producido injerencia o alteración alguna en el procedimiento administrativo seguido.
El responsable municipal de Medio Ambiente ha dicho, al respecto, que la primera denuncia por contaminación contra la discoteca es del 27 de septiembre de 2012 y la orden de cierre cautelar se dictó en noviembre de 2013.
Asimismo, la denuncia contra el insuficiente aislamiento acústico del hotel fue formulada por los responsables de la discoteca el 19 de diciembre de 2013 y la apertura del expediente sancionador correspondiente se realizó en febrero de 2014.