El encierro que el concejal de IU Raúl Ruiz-Berdejo mantuvo junto a miembros de la asociación Apesorje hasta el viernes podría haber finalizado 24 horas antes y en la práctica poco después de que se iniciara dado que la propuesta que se aceptó entonces era básicamente la misma que el Gobierno local había puesto sobre la mesa el mismo jueves.
Fuentes del Ejecutivo municipal acusan de hecho a IU de haber prolongado de manera innecesaria esa medida de protesta, tal y como se pone de manifiesto en un documento al que ha tenido acceso este medio.
En ese escrito se ofrecen detalles de la propuesta con la que el Gobierno local pretendía zanjar la cuestión.
En el documento se hace constar que el servicio de intérprete de lengua de signos no puede seguir siendo prestado bajo la modalidad de un convenio ya que al ser una prestación de servicio debe realizarse a través de un concurso público.
En este apartado se asegura que la citada licitación está en fase de finalización y que próximamente será elevada a Junta de Gobierno para su aprobación.
Por otra parte, el Ejecutivo deja claro que no puede mostrar las bases de la licitación del servicio con anterioridad a su publicación, para su revisión y mejoras, porque de ser así se incurriría en una ilegalidad y se faltaría al principio de libre concurrencia.
En este apartado, se anima a Apesorje a trasladar las propuestas que estime oportunas para ser incluidas en la licitación tras el estudio oportuno.
Tampoco es posible que el Ayuntamiento contrate a un intérprete porque el Plan de Ajuste impide la contratación de personal por encima de la plantilla.
No obstante, se contempla la posibilidad de crear una plaza, modificando la RPT para su inclusión y una vez creada sacar una convocatoria de oferta de empleo público para su cobertura.
Por último, se deja claro que el Ayuntamiento está al día en el pago de las facturas y ante la reclamación de una factura de 2020 se explica que no se puede abonar porque no se ha podido acreditar la prestación del servicio.
