El Juzgado de Guardia ha decretado el ingreso en prisión comunicada y sin fianza hasta la celebración del juicio oral de un hombre de 32 años de edad como presunto autor de un delito de homicidio en grado de tentativa, atentado contra agentes de la autoridad y delito contra la seguridad vial.

Los hechos se produjeron sobre las 15.00 horas del pasado viernes en la barriada de Federico Mayo, cuando el individuo ahora preso atacó a otra persona con un cuchillo de cocina de gran tamaño aprovechando que dormía en su habitación.

La víctima trató de defenderse en cuanto se percató de la agresión, lo que no evitó que resultara herida de gravedad al recibir cuatro puñaladas en la zona dorsal, unas heridas por las que aún se encuentra ingresada en la UCI del Hospital de Jerez con pronóstico grave aunque no se teme por su vida.

El centro de coordinación del 112 recibió varias llamadas alertando de lo ocurrido, lo que permitió que se personaran en el lugar efectivos de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía.

Los policías locales practicaron primeros auxilios a la víctima, que presentaba heridas incisas de gravedad en la espalda y cortes profundos de defensa en sus manos.

En base a la descripción del presunto autor de los hechos que ofreció la propia víctima, la Policía Nacional activó un operativo de búsqueda, localizando al individuo a bordo de una moto en las inmediaciones de la Laguna de Torrox.

El sospechoso no atendió las indicaciones de los efectivos policiales, emprendiendo una huída a gran velocidad hacia la barriada de la Sierra de San Cristóbal, que atravesó poniendo en serio riesgo la vida e integridad de sus vecinos, incluidos varios niños que jugaban en la calle.

La persecución continuó hasta que en una senda estrecha perdió el equilibrio y cayó al suelo, momento en el que los policías lograron alcanzarlo y procedieron a su detención, a la que opuso resistencia activa con violencia.

Una vez detenido fue trasladado a la Comisaría, dándose la circunstancia de que en el momento de la lectura y firma de sus derechos arrancó el bolígrafo dispuesto en la mesa para este fin con la intención de clavárselo en la cara a uno de los funcionarios.

Pese a su enorme agresividad pudo ser reducido por segunda vez, no sin antes producir golpes y contusiones a los agentes, a uno de los cuales llegó a fracturarle la falange del dedo pulgar de la mano izquierda.

El sujeto quedó posteriormente a disposición de la autoridad judicial, que decretó su ingreso en prisión a la espera de juicio.