El
paro indefinido en el
sector del transporte convocado por la Plataforma del Sector del Transporte de Mercancía por el alto precio del combustible cumple esta madrugada su
primera semana con pocos visos de solución a corto plazo y con cada vez más daños colaterales en el comercio mayorista, el minorista y la propia hostelería. Aunque empiezan a escasear productos, de momento en puntos neurálgicos de Jerez y la provincia como
Mercajerez, el
abastecimiento está “garantizado para el lunes y el martes”, según explica a Información el propio gerente, Ángel Salazar. “Ha habido movimiento, esta madrugada (por ayer) entraron tres tráileres y también furgonetas de la costa; es verdad que no entra todo lo necesario, pero seis o siete mayoristas, de los 12 que tenemos, están recibiendo mercancía”, precisa. No obstante, el balance está lejos de una actividad normal, puesto que, a día de hoy, está entrando “entre un 30 y 40%” del total de la mercancía después de que camiones hayan podido acceder, lo cual no ha ocurrido en otros mercados más grandes como Mercasevilla o Mercamadrid donde los piquetes informativos “se mueven bastante”. Eso sí, algunos
camiones han tenido que ser escoltados por la Policía Nacional desde la Ciudad del Transporte.
Lo que más les preocupa es cómo va a evolucionar el día a día, reconoce Salazar, a quien le consta que la gente está “preocupada” ante la falta de avances en la negociación. Por lo pronto, antes del fin de semana, puesto que el fin de semana no había mercado, Ehabían entrado patatas, pimientos, tomates y plátanos, apunta, en unas cantidades suficientes como para poder aguantar hasta el martes. El resto, es una incógnita, como también lo es en los mercados centrales de abasto.
En el de
Jerez, de momento, también aguantan el tirón aunque no con todo el género que quisieran, pero “defendible”, señala el presidente de la
Asociación de Comerciantes de la Plaza de Abastos, Juan Ignacio Parada. “No sabemos qué va a pasar la semana que viene, porque cada vez está la cosa un poco más difícil". Eso sí, a última hora de este domingo aseguraba a este periódico que a partir de este martes en la
plaza volverá a haber "todo tipo de pescado. No hay ningún tipo de problema".
Una situación que debe repercutir igualmente en las pescaderías que estos últimos días han decidido no abrir en algunos barrios de la ciudad al no tener existencias, mientras que el sector de la
hostelería se empieza a ver obligado a poner “productos fuera de servicio temporalmente” en su carta, la cual empiezan a tener que adaptar, como consecuencia de los paros, mientras el precio de la harina para freír pescado y el del aceite girasol alto oleico se ha incrementado en los últimos días entre un 40 y un 50%. “Son porcentajes brutales que al final mínimamente tiene que repercutir en la carta pero intentando siempre que el cliente note lo mínimo; hay cosas que no he subido todavía y voy intentar soportar un tiempo más, pero ya he recibido correos de bodegas avisando de que con el encarecimiento de la materia prima va a haber subida”, explica el hostelero jerezano Francis Castell, de Albur Cervecería, a quien le sorprendió ver “tantas estanterías vacías” en distribuidor mayorista como Macro en Jerez y limitando a envase por día las garrafas de aceite de cinco litros.
En el caso de su negocio, pudo conseguir que los distribuidores le sirvieran cerveza y vino para el fin de semana, pero, como en otros tantos establecimientos hosteleros de Jerez, no tuvo la misma suerte con Coca Cola, en cuya nave de El Portal hay bastantes piquetes concentrados, lo cual ha impedido salir a los camiones. Una circunstancia que ha obligado a muchos hosteleros a acudir con su coche particular, bajo su responsabilidad y dar “hasta ocho viajes” para cargar cajas.
En la Asociación de Hostelería de Jerez su presidente, Alfredo Carrasco, lo tiene claro: si el conflicto no se arregla, “nos estamos planteando sumarnos otros gremios; esto ya es insostenible”, sentencia.
Lácteos, boquerones, filetes de cerdo, bombonas de butano...ya escasean
Las grandes superficies comenzaron la semana llamando a la calma y garantizando el abastecimiento. Ciertamente, los lineales siguen ofreciendo productos, pero la variedad empieza a resentirse y en la lista de la compra hay que empezar a buscar planes b, c y d en el caso de los lácteos, o la carne de cerdo, mientras que las zonas de pescadería tanto en grandes superficies como en el pequeño comercio llevan casi toda la semana sin boquerones. También hay productos que cuesta más trabajo encontrar a nivel doméstico como los arroces, las patatas y las harinas. De igual manera en los últimos días también se ha convertido casi en misión imposible encontrar bombonas de butano en Jerez y en toda la provincia de Cádiz.