Joselu y Manu Molina se hicieron este miércoles portavoces del hartazgo ante una situación cada vez más “chunga”
El perro es cada vez más flaco y las pulgas cada vez ocupan más hueco en el famélico cuerpo que muestra institucionalmente el Recreativo de Huelva presidido por Pablo Comas. La última negativa de Hacienda al plan de pago de la deuda presentada por el Consejo de Administración albiazul ha significado un nuevo palo para el vestuario, que veía en el sí de Hacienda la única salida para poder cobrar las nóminas que se les adeuda, y que ahora están, más si cabe, quemados ante una problemática a la que no se le ve solución debido al embargo de las cuentas del club.
Este miércoles, los jugadores Joselu y Manu Molina se hicieron portavoces de un equipo “triste” que, a duras penas, trata de aislarse de lo extradeportivo, pero que están demostrando en el campo que el agobio económico está pasando factura a su rendimiento.
Joselu lo resumió con claridad: “Ya está bien, el equipo necesita cobrar, algunos jugadores lo están pasando muy muy mal y hay otros jugadores que les están ayudando porque no podrían seguir”. El delantero cartayero dejó claro que “necesitamos una solución ya, que la busquen rápido porque no sé cómo va a acabar esto y necesitamos cobrar ya”. “Es de lo que se habla en el vestuario. Van a ser unas navidades amargas para el total de la plantilla”.
Además, se quejó de las formas de los dirigentes y la falta de información que les han transmitido, hasta tal punto que se han enterado del fracaso de la gestión con Hacienda a través de las redes sociales: “Algunos componentes del equipo que tienen Twitter lo han visto y se ha corrido la voz”.
Con todo, esto Joselu completó su rajada asegurando que “a mí me duele, no sé a los demás. En verano nos debían un dinero y perdonamos para que el club no tuviera problemas y aún no nos han pagado nada. Si te hago un favor también quiero que me lo hagas. Nos deben estos tres meses y nos queda seguir adelante. Sabemos que la situación económica es difícil y que hay que ayudar, pero ya está bien”. Y a todo esto, el sábado llega Las Palmas, líder de la categoría, en un momento en el que “el equipo está triste por todo esto y hay que reunirse y juntarse y hacer un llamamiento a la afición, que esté con nosotros para sacar el partido y la temporada adelante”.
Sobre el mismo aspecto, la negativa de Hacienda, se pronunció Manu Molina: “Antes teníamos esperanzas de que esto se arreglase, pero ahora parece que la cosa está chunga. A nosotros nadie nos ha transmitido nada y supongo que se lo dirán al capitán”. El mediocampista onubense señaló que respecto a denunciar los impagos ante la AFE “hemos hecho lo que teníamos que hacer. Ya nos deben tres meses y van para cuatro. Es un gran palo y no sé qué pasará ni qué medios nos dirán ahora ni qué ocurrirá con el tema del dinero que nos deben”.
En cuanto a las formas de los mandatarios, también se pronunció: “Somos los últimos en enterarnos de las cosas y nadie nos dice nada ni está por aquí”.
Pese a todo, dejó un mensaje deportivo de cara al partido del sábado: “Vamos a demostrar que somos un bloque, que estamos unidos y que nos vamos a dejar la piel y el pellejo, dejando a un lado lo extradeportivo”.