Una caravana conformada por una veintena de coches ha recorrido esta mañana durante una hora las principales calles de la capital en protesta por los recortes tanto del Gobierno central como de la Junta de Andalucía. El sindicato CSI-F, convocante de la caravana, continúa de esta forma su calendario de movilizaciones contra los planes de ajuste en el sector público que van a suponer una merma en la calidad de los servicios que se prestan a la ciudadanía tanto por la reducción de personal como de inversiones.
La caravana ha partido de la avenida del Molino de la Vega y ha concluido en la calle Mozárabes, donde se encuentra la Delegación de Hacienda y Administración Pública de la Junta de Andalucía. Durante el trayecto, la comitiva ha pasado por las sedes de diferentes administraciones como la Subdelegación del Gobierno, el Ayuntamiento así como el Palacio de Justicia y otras delegaciones de la Junta de Andalucía sin olvidar la Universidad por donde la caravana ha pasado con sonoras pitadas.
Con este recorrido, CSI-F ha querido escenificar el alcance de los recortes ya que el itinerario ha incluido a todos los sectores que ya se están viendo afectados como la enseñaza, la sanidad o la justicia.
En este sentido, la Central Sindical seguirá hasta final de este mes con la campaña “Rotundamente NO” contra los recortes que, además de las movilizaciones, incluye una recogida de firmas para pedir en el Parlamento andaluz la reducción del número de altos cargos y sus salarios. De la misma forma, CSI-F está proponiendo una serie de alternativas en las que se podía reducir gastos de la Administración como la eliminación de las subvenciones a partidos políticos, sindicatos y organizaciones empresariales o la reducción de cargos de confianza y asesores.
Finalmente, durante la caravana reivindicativa CSI-F ha podido comprobar el malestar y la indignación de los ciudadanos, muchos de ellos apoyando la protesta a su paso. Por todo ello, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios lamenta que “seguimos viendo cómo las administraciones continúan subvencionando a algunos sindicatos y a algunas organizaciones empresariales manteniendo órganos y cargos prescindidles mientras hace recaer todo el peso de los planes de ajuste en los empleados públicos”.