El portavoz del PSOE en la Diputación de Málaga, Francisco Conejo, ha afirmado que la remodelación del gobierno en la institución provincial es un "ajuste de cuentas" del presidente, Elías Bendodo, con su vicepresidente, Francisco Salado, tras las declaraciones de este último postulándose para sustituirlo.
"Al delfín tiburón Bendodo no le ha gustado nada que Salado se postule como su delfín en la Diputación y, al más puro estilo De la Torre --alcalde de Málaga capital--, ha castigado a quien aspira a sucederle", ha señalado, agregando que Bendodo "copia una vez más lo peor de De la Torre y defenestra a quien osa a sustituirlo".
En este sentido, Conejo ha señalado que la remodelación "no es una liberación" para que Salado se dedique a la Alcaldía de Rincón de la Victoria, sino una "condena" por mostrar su disposición a sustituir a Bendodo. "Salado pierde poder pero asume la portavocía del gobierno, un puesto que requiere dedicación sobre todo en un mandato como el actual en el que no hay mayoría absoluta y es necesario el diálogo de todos los grupos políticos", ha explicado.
No obstante, el portavoz socialista ha criticado el "desgobierno y la parálisis" en la gestión en la institución provincial. "Si el presidente, Elías Bendodo, está más centrado en su campaña como candidato a la Alcaldía de Málaga, el vicepresidente y ahora portavoz, Francisco Salado, tiene que dedicarse a Rincón de la Victoria, y la nueva vicepresidenta, Francisca Caracuel, está dedicada a desestabilizar el gobierno municipal de Marbella ¿quién gobierna en la Diputación?", se ha preguntado.
De esta forma, ha apuntado que "la mejor muestra del desgobierno en la Diputación" es "que un organismo como el Patronato de Recaudación, en el punto de mira por la situación laboral y judicial que atraviesa, lleva ya tres presidentes diferentes en dos años".
Asimismo, ha resaltado el hecho de que el nuevo consejero de Turismo y Planificación Costa del Sol sea Jacobo Florido, "responsable de los dos mayores fiascos del PP en la Diputación: el Museo Taurino en la Plaza del Siglo y la Plaza de la Gastronomía en la plaza de toros". "Bendodo premia el fracaso", ha apuntado Conejo.
"Un proyecto, el de la Plaza de la Gastronomía, que supuso el uso irregular de un Bien de Interés Cultural (BIC) y un perjuicio para varias empresas malagueñas; y otro que ha consistido en destinar la joya de la corona del patrimonio de la Diputación Provincial como es el edificio de la Plaza del Siglo a un museo que ha cometido numerosas irregularidades y que ni quiera paga el dinero al que se comprometió con la Diputación. Estos son los méritos de Jacobo Florido que ahora se ven recompensados", ha concluido.