El Consello da Cultura Galega (CCG) ha presentado este viernes un decálogo con el que invita a hacer una "necesaria reflexión" sobre el uso de la iluminación artificial exterior y con el que propone reducir la contaminación lumínica, crear mecanismos de control o una normativa para "ponerle freno", ya que "más luz no significa más seguridad".
El documento, que ya se puede descargar en la web de la institución, está dirigido a las administraciones públicas y ha sido elaborado por la comisión técnica temporal sobre contaminación lumínica creada al amparo de la jornada 'Os múltiples riscos da contaminación luminosa', organizada por el CCG y realizada en Santiago en junio de 2023.
La presentación, que ha tenido lugar en la biblioteca del CCG, ha corrido a cargo de su presidenta, Rosario Álvarez, de la coordinadora de la sección de Ciencia, Tecnoloxía, Natureza e Sociedade, Elena Vázquez, del miembro de la comisión Salvador Bará y del científico y coordinador de la comisión Jorge Mira.
Según ha explicado Mira en su intervención, este documento parte de premisas como que la luz "contamina y afecta a la salud de las personas" o que la opción "por defecto" debe ser siempre no iluminar y desmentir el "mito" de que "más luz es más seguridad".
"Alumbrar por alumbrar no tiene sentido, hay que empezar a reducir la intensidad de la luz de noche y que el diseño urbanístico de los ayuntamientos eviten los contrastes. El concepto de 'feísmo' debe ser ampliado para incorporar este tipo de cosas", ha subrayado Mira.
DIEZ RECOMENDACIONES
Entre las recomendaciones que conforman el decálogo se incluye la creación de "mecanismos de control" dentro del marco de los organismos y servicios de ordenación urbana y del territorio. Así como la necesidad de exigir evaluaciones "de impacto ambiental" en torno a las nuevas instalaciones de iluminación.
Otros de los puntos se refieren a la elaboración de una normativa que "ponga freno" a la instalación "generalizada" de pantallas publicitarias "ultrabrillantes" y a la reducción de los niveles de iluminación y de la intensidad de la luz emitida en horario nocturno.
En esta línea, el documento también detalla que para elaborar los proyectos y/o conceder autorizaciones, las administraciones públicas deberían solicitar el consejo de profesionales con experiencia en diseño de iluminación "independientes de las empresas proveedoras e instaladoras".
"Es necesario y urgente revertir la injustificada tendencia actual a aumentar la superficie iluminada, y en particular evitar la iluminación ornamental, ya que sus beneficios no compensan las consecuencias que produce sobre el medio ambiente nocturno", se detalla en el cuarto punto.
En este sentido, el siguiente punto pone el foco en las "actuales tendencias a la exageración y competitividad" en lo que se refiere a las decoraciones navideñas y han advertido de un "peligroso efecto contagio".
"Hay que hacer una reflexión colectiva, es una competición sin límites en la el fin solo lo pone la capacidad presupuestaria, hay que encontrar un punto de equilibrio y nosotros proponemos que la gente piense sobre qué tipo de mensaje estamos enviando porque dentro de unos años nos llevaremos las manos a la cabeza", ha advertido Bará.