Los acusados de tirar a un hombre desde un tercer piso niegan que lo conociesen

Los dos procesados que se enfrentan a diez años y nueve meses de prisión por presuntamente intentar matar a un hombre al que tiraron por la ventana de su casa tras coaccionarlo para que la abandonara, sin conseguirlo, han negado este martes que conociesen a la víctima.

El acusado J.S.A. ha insistido en que no sabe quién es el perjudicado, que no estuvo en el domicilio de éste en Roquetas de Mar (Almería) a las 22:00 horas del 30 de diciembre de 2020 o en otro momento de dicha día, y ha subrayado que tampoco lo instó a plantar marihuana en ese inmueble, a dejarlo en caso de no hacerlo, o que lo tirase por la ventana.

“Puede que se hayan confundido conmigo, un equívoco en la identificación por ser gordo (…) Me habrán confundido con otra persona gorda”, ha dicho.

Por su parte, el procesado L.E.R.S. ha aseverado que él tampoco conocía a la víctima y que cuando se produjeron los hechos estaba con su expareja y sus hijas. Como el anterior, ha rechazado que lo coaccionasen para plantar marihuana, lo amenazasen con cuchillos o lo arrojasen por la ventana.

El senegalés que presuntamente fue arrojado por los acusados no ha comparecido en la vista oral, aunque sí ha declarado como testigo otro subsahariano que residía con éste y que ha manifestado que J.S.A. fue el que dio la casa al supuesto perjudicado para que la ocupase.

Ha añadido que el día de los presuntos hechos discutió con este procesado por un dinero que le debía y que no le iba a pagar: “Yo soy una africano fuerte y sé que eres gitano, pero yo soy africano, así que dame el dinero antes de que tengamos problemas”, le dijo al procesado según su declaración.

No obstante, ha reconocido que no vio lo que le ocurrió a su compañero de piso, ya que había bajado a una tienda y se quedó “hablando con un paisano”, de forma que estaba en la puerta de este negocio cuando escuchó que alguien caía.

“Había mucha gente gritando, diciendo que había problemas y que había saltado un moreno”, ha añadido, para precisar que tras correr al lugar vio a su compañero en el suelo.

Aunque no pudo ver a los procesados arrojándolo, sí que ha mantenido que estaban por la zona, e incluso ha argumentado que fueron a por él.

Aunque la vista oral debía haber concluido este martes, se ha señalado una nueva sesión para el 19 de diciembre, en la que se espera que pueda declarar la víctima y, tras ello, la fiscal Ana Linares y los abogados Mónica Moya y Miguel Martínez presentarán sus informes finales.

En su escrito de acusación, consultado por EFE, el fiscal ha indicado que los acusados J.S.A. y L.E.R.S. acudieron sobre las 22:00 horas del 30 de diciembre de 2020 al domicilio de Roquetas de Mar en el que residía la víctima junto a un compañero.

Ha indicado que, con la intención de "presionar" a este subsahariano y de "coartar la libertad" del mismo, le mostraron un cuchillo mientras le conminaban reiteradamente a abandonar la vivienda.

Cuando el perjudicado se negó, lo habrían agarrado para arrojarlo por la ventana del dormitorio de la tercera planta, supuestamente con la intención de "acabar con su vida".

El agredido sufrió diversas lesiones que precisaron de tratamiento médico y quirúrgico, así como de 90 días para sanar, tras lo que padece secuelas que limitan la movilidad de algunas de sus articulaciones.