Las cocinas de un restaurante de Oza-Cesuras (A Coruña) han ardido este domingo, lo que ha obligado a desalojar a los vecinos del edificio por la concentración del monóxido de carbono.
Según ha informado el 112, los vecinos de los pisos superiores han pasado la noche fuera de sus casas por precaución. Solo una familia de la tercera planta permaneció en su casa.
Todo comenzó a las 22,00 horas del sábado. Varias llamadas al 112 Galicia alertaban de un incendio en un restaurante situado en la Rúa Castiñeiro, en Oza-Cesuras.
El fuego se inició en la chimenea de la parrilla y el humo empezó a extenderse por las zonas comunes del edificio. La gente que estaba en los pisos superiores telefoneó al 112 Galicia, pues salir de sus casas era imposible.
Con esta información, los Bomberos de Betanzos y los miembros del GES de Curtis organizaron el trabajo de manera que los vecinos y vecinas de los pisos quedaron confinados en sus casas y se protegieron instalando paños húmedos en las puertas.
En el portal había una persona, que consiguieron sacar, y que fue atendida por un equipo de Urgencias Sanitarias de Galicia-061, pero sin necesidad de traslado.
Alrededor de una hora más tarde, los bomberos y miembros del Grupo de Emergencias Supramunicipal tenían el fuego sofocado. Después, procedieron a ventilar el restaurante y las zonas comunes del inmueble, y esperaron la llegada de los técnicos de la empresa suministradora de los servicios principales de electricidad y gas, que fueron interrumpidos mientras duraron los trabajos de la extinción.
Aún con todo, una vez realizadas las mediciones correspondientes, comprobaron que los niveles de monóxido seguían siendo altos, por lo que recomendaron a las familias pasar la noche fuera de sus casas. Solo permaneció una familia en la tercera planta.
En cuanto a los daños, tanto el restaurante, las zonas comunes e incluso una funeraria en el semisoto sufrieron daños, bien fuera por el fuego, por el humo o por las aguas de la extinción.
Además de bomberos y sanitarios, en este operativo participaron agentes de la Guardia Civil y personal del Ayuntamiento de Oza-Cesuras.
