El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, ha pedido a las comunidades autónomas que "reduzcan gastos innecesarios" y centren sus políticas en el mantenimiento del Estado de Bienestar, ya que "el resto, sobra".
En una rueda de prensa en la sede del PP en Madrid, Beteta ha recordado la obligación de cumplir con los compromisos en Sanidad, Educación y servicios sociales, toda vez que entiende que el Gobierno ha destinado la "financiación suficiente" para garantizarlas junto a la revalorización de las pensiones.
A pesar de reconocer que varias comunidades autónomas han pedido una financiación superior a la recibida, Beteta ha aclarado que la crisis económica ha obligado a reducir las cuantías. "Es obvio que cuando el traje se vuelve estrecho, todo el mundo quiere que sea más ancho, pero había que priorizar y no procedía a dar algunas financiaciones solicitadas", ha señalado.
En este sentido, ha resaltado que gracias a la financiación contemplada en los Presupuestos Generales del Estado, los entes locales recibirán 15.932 millones de euros, un 7% por encima de lo recibido este ejercicio.
Asimismo, ha destacado que el conjunto de la financiación territorial supera los 100.000 millones de euros. "No se pueden analizar unos Presupuestos sin tener en cuenta estas cifras que se gastan los ciudadanos con cargo a los impuestos", ha apuntado.
A su entender, las cuentas presentadas por el Ejecutivo "tienen credibilidad, son rigurosas y serias, puesto que se basan en el conocimiento de la realidad". En este apartado, ha resaltado la reducción "importante" del gasto ministerial como una de las claves para conseguir "financiación suficiente".
Beteta ha mantenido una reunión con los miembros de la dirección del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados. Antes de su intervención, el portavoz del partido en la comisión de presupuestos, Antonio Gallego, ha recordado que las cuentas del Estado "están lastradas por la herencia nefasta" recibida por el actual Gobierno.
Así, ha apuntado que la deuda se ha doblado en los últimos cinco años hasta destinar 40.000 millones de euros para pagar los intereses, lo que supone, según Gallego, aportar uno de cada cuatro euros a este apartado.
"Son unos presupuestos creados en un contexto de crisis, que tienen como objetivo la reducción del déficit y lograr ganarse la confianza de socios europeos", ha concluido.