La convocatoria de movilización y parón en la jornada de tres horas que tuvo lugar ayer, auspiciada por los sindicatos y los comités de empresa de la mayoría de contratas, tuvieron una amplia respuesta por parte de los trabajadores, acudiendo unos 450.
La intención, como explican Pedro Alemán, secretario comarcal de UGT y José Rodríguez, coordinador local de CCOO, era que todas las plantillas hicieran una movilización conjunta, pues el Consistorio está acostumbrado a actuaciones de un reducido grupo de trabajadores. Y una vez pasada la huelga general, ambos tienen claro que, si las contratas lo desean, continuarán las actuaciones.
De todas las contratas convocadas, la que peor situación plantea es Claros, cuya plantilla aún no ha cobrado, indicando una de sus delegadas, Carmen López, que en esta ocasión la empresa ni siquiera se molesta en coger el teléfono para dar explicaciones del por qué no se ha cobrado febrero y la paga extraordinaria, paga que tampoco han cobrado los trabajadores de Mayse, y que en consecuencia, fueron las que más guerra dieron ante la puerta del Consistorio, una vez finalizado el recorrido emprendedido desde el Monasterio de la Victoria y por el centro. Lóez además explica que ya han puesto la denuncia correspondiente ante la Inspección de Trabajo, indicando “la poca consideración que tiene la empresa, habiendo firmado de nuevo contrato en febrero, por un año y prorrogable a otro más, y que empiece ya sin pagarnos”.
Rodríguez asegura, en respuesta a las críticas vertidas por la concejal de Economía, Leocadia Benavente, que lo que más le duele “es la falta de respeto a los trabajadores”, puesto que “a nosotros hace tiempo nos decían que le bailábamos el agua al PP, ahora al PSOE, y así siempre, las escuchamos como el que escucha llover”. Alemán por su parte indica que “es mentira” lo que se dice, porque sólo hay un ánimo laboral”. En líneas generales exigen, al igual que en el Pleno convocado el viernes pasado, un calendario de pagos, y que las empresas no tomen a los trabajadores como rehenes para mejorar su situación e incluso para cobrar ellas.
Rodríguez entiende que los representantes de los trabajadores tienen que tener excesivo celo con los recortes que se realicen auspiciados por la reforma laboral, y pidiendo siempre que sean temporales, hasta que pase la crisis económica, pues “no podemos dar pasos atrás”. Además, reconoce que las declaraciones que llegan del
Consistorio, diciendo que los trabajadores de las contratas han cobrado, no son ciertas, pues habiendo una o dos que no lo hayan hecho, se corrobora que no están cumpliendo con sus obligaciones.
Pedro Alemán asegura que están satisfechos con la participación habida en la movilización, pues “ha habido una respuesta importante”. Al Ayuntamiento solicita que “pague y dé una solución, exigimos un calendario de pagos. Los trabajadores cumplen con su trabajo, prestan el servicio, impecable, hay que decir, por lo tanto ahora les toca a las empresas y al Ayuntamiento”, admite.