El delegado territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta en Córdoba, Manuel Carmona, ha afirmado este miércoles que las obras del Palacio de Congresos y Exposiciones de Córdoba, ubicado junto a la Mezquita-Catedral y cuya reforma ejecuta la Junta, "van bien", mientras que están "pendientes" de que les "llegue la delegación de competencias para abrir el proceso de licitación" de la gestión del equipamiento.
En rueda de prensa, Carmona ha señalado que "hay un empeño por parte de la empresa" pública Tragsa, que ejecuta las obras, en cuanto a "intensificar los trabajos y cumplir con lo que tenemos comprometido", de forma que, la conclusión de la primera fase de las obras, tras una inversión de la Junta de 5,3 millones de euros, permita la apertura del Palacio de Congresos en la calle Torrijos, y que pueda acoger, como ya se anunció en su día por la Junta, "el 95 por ciento de los congresos" de los que se celebran en España, en cuanto a número de asistentes.
Entrando en detalles sobre el desarrollo de las obras, Carmona ha dicho creer que "en esta semana que entra, probablemente, se retire todo el andamiaje del salón plenario y se empiece ya con la instalación de butacas", con lo que, según ha indicado, "estamos moderadamente en el camino de conseguir" los objetivos marcados.
Las obras de la primera fase se refieren a la remodelación del Salón de Plenos y tres salas, en el entorno del Patio Azul, incrementando en más de 200 plazas la capacidad para acoger congresistas, hasta cerca de los 1.000, solo tras la primera fase.
También se incluye en esta primera fase el acondicionamiento de la zona exterior, como el adarve y el patio, la adecuación de instalaciones y de accesibilidad, y la redacción del proyecto de terminación de la muralla andalusí, de forma que este próximo verano, según las previsiones de la Junta, este espacio podrá abrirse para acoger nuevos congresos.
Ello será posible porque la encomienda de gestión del equipamiento se pretende que sea una realidad próxima, ya que el proceso correspondiente, en base a criterios tratados con patronal y sindicatos del sector, se desarrollará en paralelo a la culminación de la primera fase de las obras.
La segunda fase, que se ejecutará a lo largo de 18 meses y ya con el Palacio de Congresos en funcionamiento, hará que la inversión total de la Junta alcance los nueve millones de euros y permitirá, no solo incorporar un reformado Patio Mudéjar, con suelo de cristal y su galería superior también acristalada, sino también un nuevo espacio hasta ahora no aprovechado, el Patio Italiano, que podrá tener uso independiente del Palacio de Congresos, junto a la cafetería del mismo, tras culminar la citada segunda fase.
Esta intervención, según se ha resaltado ya desde la Junta, permitirá contar en Córdoba "con un espacio para desarrollar una industria congresual donde se ofrezcan los mejores servicios para la celebración de congresos, convenciones y eventos, diferenciándose por la calidad e innovación de sus instalaciones, con el fin de convertirse en referente nacional e internacional".
Para ello, se apoyarán en "la singularidad del Palacio de Exposiciones y Congresos de Córdoba", que ocupa un histórico edificio del siglo XVI, declarado por sí mismo Bien de Interés Cultural (BIC), y ubicado en un entorno declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, junto a la Mezquita-Catedral de Córdoba.
