La revista francesa Paris Match ha publicado un reportaje a cuatro páginas sobre el cambio de rumbo en el Ayuntamiento gaditano tras las elecciones municipales de mayo. Se titula 'Cádiz. La bella revolucionaria' y presenta al alcalde, José María González, de 'Por Cádiz sí se Puede' (PCSSP), como a un hombre "humilde" que ha comenzado a aplicar la "democracia en el poder" después de "20 años de hegemonía conservadora manchados por la corrupción y el clientelismo".
El reportaje presenta la "pequeña revolución" que han traído las elecciones municipales españolas, donde han "calado" las listas ciudadanas "alrededor de los indignados antiausteridad de Podemos" y que han conseguido alcaldías "cruciales" como Madrid o Barcelona.
Cádiz también se ha situado "en primera línea" y ha conseguido que los medios de comunicación "se vuelvan hacia esta ciudad desatendida que normalmente sólo aparece en las noticias por sus cifras de paro". Ahora, el alcalde, "un profesor de geografía sindicado", hijo de un soldador y una ama de casa "conocido por su voz estentórea en un grupo de carnaval", ha adquirido "renombre nacional".
El reportaje relaciona esta circunstancia con el hecho de que González sea pareja sentimental de Teresa Rodríguez, la "guapa y belicosa" líder de Podemos en Andalucía y que, según apunta, está "en pleno auge".
De ella, resalta que "ha renunciado al Audi A6 y va a Sevilla --donde ejerce su actividad como parlamentaria-- en autobús". De él, que ha "terminado con la escolta de su predecesora --Teófila Martínez (PP)-- y con los coches oficiales" para ir a pie al trabajo. Todo ello, según destaca, para "predicar con el ejemplo" y lograr que el pueblo se sienta "representado por sus políticos".
El artículo se refiere a Podemos como un partido de "izquierda radical", como "el Syriza español". Tanto es así que atribuye al edil de Hacienda, David Navarro, el apodo del 'Varufakis gaditano'.
Este 'Varufakis gaditano' "calvo, rebelde, que circula en moto y tiene la competencia en presupuesto" se encuentra en "una encrucijada", ya que sostiene que la deuda heredada sitúa al Ayuntamiento "al borde de la bancarrota" y debe ajustar el presupuesto de aquí a 2016, "liquidar 80 millones de euros a los proveedores al borde de la asfixia" y, al mismo tiempo, "hacer una política que ayuda a la población desfavorecida, que amplíe el parque de viviendas".
GESTOS, MEDIDAS Y EXPECTATIVAS
Frente a una Teófila Martínez "de sonrisa encantadora y estilo autoritario que aún no comprende cómo ha podido ser apartada por estos desharrapados", Paris Match define a González como un hombre "humilde" que va a trabajar y se reúne con autoridades llevando "vaqueros y pendientes".
Alguien que se define como "un simple ciudadano" que se dio tanta prisa en "bajar los salarios de los ediles, incluido el suyo", como en quitar el crucifijo de su despacho y en desplazar un cuadro del rey Juan Carlos I para colocar otro del alcalde anarquista Fermín Salvochea.
Describe momentos como cuando el alcalde, al que se refiere en la mayor parte del texto como 'Kichi' --su apodo desde que era niño--, salió recién investido al balcón municipal con el bastón de mando ante una plaza "rugiente de entusiasmo", o cuando le fue impuesta la medalla de la Hermandad del Nazareno "por respetar una tradición" pese a que su movimiento político es "ateo, laico, incluso anticlerical".
Califica la revista como "muy ambiciosos" a "Kichi y los suyos", haciendo referencia a medidas de su programa electoral como un plan de empleo y una "revolución" de la vivienda. En este sentido, recoge las dudas que dicho programa plantea a los portavoces de los grupos de la oposición --PP, Ciudadanos y PSOE--.
El reportaje reconoce el "apoyo crucial" de los socialistas para que González accediera a la Alcaldía, si bien el PSOE "también teme el mañana", ya que entiende que "hay que poner los pies en la tierra" y, a su juicio, la gente de Podemos sostiene que "la utopía soñada es posible".
Según Paris Match, "desde la irrupción de Kichi al mando los vientos de cambio soplan tan fuerte como el levante en esta casi isla del Estrecho de Gibraltar", ya que su "discurso de ruptura ha generado una fuerte esperanza". Sin embargo, también recopila el testimonio de otra parte de la población gaditana que teme que "este aventurismo no les lleve a ninguna parte".
El texto concluye con la reflexión al respecto de uno de los fundadores de Podemos en Cádiz, quien señala que "si esta experiencia fracasa, una gran mayoría de gente se desinteresará de la política. Pero, ¿y si funciona?".
