Manuel Lorenzo Cornejo, hijo del eterno 'Don Adolfo', lleva el carnaval en la sangre. Se inició con su propio proyecto en adultos en 2022, consiguiendo el tercer premio con
Cádiz de mi alma el año de su debut. En su haber cuenta con una final y una semifinal en las dos agrupaciones con las que hasta ahora ha participado en el COAC. Este año presentará sobre las tablas del Falla la comparsa
Los poderosos.
¿Cómo han sido los meses de ensayo?
–Los ensayos han ido muy bien. Normalmente llevamos muy bien el proceso, a mí personalmente es lo que más me gusta, el ensayo y ver cómo va formándose la historia. Cuando empieza el concurso se me hace algo más pesado, pero los ensayos me gustan mucho, hemos disfrutado.
¿Qué aspiraciones tiene la agrupación para este COAC?
–Estar compitiendo hasta que el jurado lo crea oportuno. No nos ponemos techo ni límites, pero somos conscientes de que la competencia va a ser dura. Vamos a intentar dar lo mejor de nosotros mismos para intentar llegar a lo máximo que nos dejen. La aspiración es estar ahí dando codazos hasta que el jurado diga lo contrario, ojalá sea hasta el final.
¿Qué te parece el modelo de concurso actual?
–La verdad es que este año se me está haciendo especialmente largo, aunque he tenido suerte porque canto por la mitad, pero aún así lo veo muy largo. Un mes y algunos días de concurso me parece una exageración, antes el concurso completo duraba lo que duran ahora las preliminares y para el que concursa se hace muy pesado. Es verdad que no acaba tan tarde y el aficionado tiene acceso a oírlas todas porque al acabar a las once y no a las tres de la mañana escuchas todas. Pero un mes y pico liado con el concurso me parece bastante largo, sobre todo para el que participa. Al grupo que cantó el primer día, hasta que no cante en Cuartos le da tiempo de hacer otra comparsa.
¿Cómo ves este año la modalidad de la comparsa?
–Muy competida, es una modalidad en la que hay mucha competencia e igualdad. Ante tanta calidad, dependerá de los gustos del jurado. Aún faltan muchos compañeros por cantar, esto es muy largo y se resolverá a gusto del jurado. La igualdad va a ser la tónica de este concurso.
¿Os sentís ya una agrupación esperada por el público tras estos dos años?
–La verdad es que hemos tenido bastante aceptación estos dos años, el aficionado nos acogió con mucho cariño y creo que, en mayor o menos medida, la comparsa genera cierto interés. Es verdad que puede ser que un cierto sector de los aficionados estén esperando con curiosidad a ver qué traemos. Evidentemente nos falta la trayectoria que tienen otros y esa expectación, pero poquito a poco creo que estamos despertando interés en ciertos aficionados y es de agradecer que nos tengan en cuenta.
El nombre de Cádiz no está en la comparsa este año, ¿supone eso un cambio de registro?
–El nombre de Cádiz no está porque ha surgido así, no nos hemos impuesto quitarlo ni en años anteriores nos impusimos ponerlo. Surgió así, nombres que nos gustaron y nombres por los que tiramos. La comparsa creo que tiene un giro, es distinta a las anteriores, no es lo mismo, hemos querido darle una vueltecilla de tuerca a lo que hemos venido haciendo estos años. Podemos decir que, aunque sea distinto plato, esperemos que se note que es del mismo cocinero.
¿Crees que existe un buen relevo generacional en la modalidad?
–Creo que sí. Hay gente joven que lo está haciendo muy bien, hay comparsas que están haciendo un buen papel y ofrecen una calidad muy buena. Es indiscutible que los pesos pesados lo hacen muy, muy bien, pero creo que sí, que los que venimos por detrás poco a poco estamos empujando y es de agradecer para la modalidad y para la fiesta en general.