La Junta de Gobierno Local ha aprobado esta semana un proyecto de actuación para la construcción de una nueva almazara en el término municipal de Arcos, concretamente en una finca situada entre la barriada rural de la Junta de los Ríos y Jédula, que supondrá una importantísima inversión de siete millones de euros. Esta nueva industria aspira a producir hasta 30.000 toneladas anuales de aceite de oliva. La almazara Casablanca podría crear decenas de puestos de trabajo en torno a la industria del aceite, lo cual ha sido muy bien recibido por parte del equipo de Gobierno, sobre todo en un momento donde el empleo y la iniciativa privada en este sentido se han visto mermados como consecuencia del Covid-19. El alcalde de la ciudad, Isidoro Gambín, ha señalado que el ejecutivo siempre apoyará proyectos de esta índole por la creación de empleo y riqueza en el territorio.
De otro lado, la Junta de Gobierno Local ha adjudicado la obra en la calle Vejer para la reducción de uno de los dos acerados al objeto de permitir el aparcamiento en la zona y la operatividad de los vehículos de seguridad en caso de accidente o emergencia. Con esta actuación se atiende una demanda de los vecinos de la calle Vejer. La obra ha sido adjudicada por unos 20.000 euros a la empresa local Arcoscons.
Además, la Junta de Gobierno Local ha aprobado el mantenimiento técnico legal y correctivo de las instalaciones, equipos y sistema de calefacción por caldera de gasoil en los colegios de Arcos; un mantenimiento que hasta ahora asumía el Ayuntamiento y que ha sido adjudicado a una empresa por valor de 10.290 euros.
Por último, se ha llevado a cabo como medida de ahorro la adjudicación para el arrendamiento financiero de vehículos para distintas áreas del Ayuntamiento. Con ello se adquieren seis vehículos en renting -uno completamente adaptado para personas con discapacidad- para el traslado de usuarios del centro ocupacional Juan Candil (actualmente el servicio se mantiene con dos autocares de alquiler) e incluso un vehículos elevador con plataforma para trabajar en tareas de poda, cambio de luminarias y de pintura que ya no tendrá por qué ser alquilado puntualmente con el consiguiente ahorro. También otro vehículo con batea para trabajos en infraestructuras. Esta operación comporta una inversión de 395.000 euros en cinco años, muy por debajo del coste actual. Además, estos vehículos en renting proporcionarán mayor seguridad, si cabe, a los trabajadores públicos y usuarios beneficiarios.
