Garantizar el acceso al agua. Ése es el
objetivo final de la tarifa social puesta en marcha por
Emasesa y que ya ha hecho posible que beneficie a
11.500 habitantes de Sevilla y su área metropolitana desde que se puso en marcha el 28 de mayo de 2020,
7.700 familias beneficiadas, de las que
800 se encuentran actualmente
en estudio.
La medida, que responde al principio de que
el agua es un derecho humano básico, como tiene reconocido Naciones Unidas, ha permitido que
el 53% de estas familias hayan podido bonificar el 100% de los conceptos de la factura cubiertos por la tarifa social mientras que
el 47% restando han visto bonificada en un 50% su factura.
Y lo que es más importante,
se consolida el programa social de Emasesa que garantiza que no se produzca ningún corte de agua a los hogares por motivos económicos.
El
montante total de estas bonificaciones se elevan, en términos anuales, a los 530.000 euros, de las que se benefician especialmente
familias en situación de vulnerabilidad, un extremo especialmente
significativo en tiempos de pandemia, cuando la
crisis del coronavirus
ha incidido más negativamente en la población de riesgo, con una merma de los ingresos y un alto incremento del paro y el desempleo en este colectivo.
El compromiso
“
Emasesa va a estar al lado de la población a la que abastece y aún más de aquellos que tienen dificultad hasta para pagar la factura del agua. Esta empresa pública está al lado de quien más lo necesita, más aún en estos momentos”, ha asegurado el
consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop.
El
compromiso social que siempre ha mantenido Emasesa, que le ha llevado a
gestionar el servicio del agua y saneamiento en Sevilla y su área metropolitana
de una forma ética y con garantía de acceso a este recurso a toda la ciudadanía, se torna
especialmente importante en esta situación de pandemia.
Emasesa, así,
aplica los principios de solidaridad con aquellas personas que se encuentran en
situaciones de vulnerabilidad o riesgo de exclusión social. Y con ese espíritu que marca su trabajo desde hace años, con la idea fundamental de la
sostenibilidad social, más tras la crisis del coronavirus, s
e trabaja con la colaboración de los distintos Agentes Sociales y en coordinación con los Servicios Sociales Municipales, buscando soluciones encaminadas a
dar respuesta a aquellas familias que no pueden hacer frente a los pagos habituales de la factura del agua a su vencimiento.
Ya el 26 de septiembre de
2016 el Consejo de Administración de esta empresa aprobó una modificación de la normativa que regula el servicio que presta para
recoger la no suspensión del suministro para usos domésticos a aquellas personas que estén en situación de
emergencia social válidamente
acreditada por los servicios sociales municipales, recogida en la Ordenanza de Emasesa de 2017.
Todo este sistema de garantía social se reforzó con la aprobación, en octubre de 2019, por parte de este Consejo de una
tarifa social que establece
por primera vez en la historia de la empresa una
tarifa ajustada a los ingresos de los hogares, con bonificaciones entre el 50% y el 100% para los ingresos más bajos.
Este sistema,
en vigor desde el pasado 28 de mayo, además
consolida la garantía del mínimo suministro vital para todos los hogares en situación de vulnerabilidad y en riesgo de exclusión al garantizar un
consumo de hasta 110 litros por persona y día (superior al mínimo vital recomendado por la OMS).
Con estas medidas, más el catálogo de préstamos y ayudas sociales que posee Emasesa,
se consolida el programa social que garantiza que no se produzca ningún corte de agua a hogares por motivos económicos.
Más ayudas sociales a familias vulnerables
Además de la tarifa social, Emasesa dispone de un amplio
programa de ayudas destinado a garantizar el acceso a los servicios de agua y de saneamiento a familias en situación de vulnerabilidad económica.
Así, a lo largo del
año 2020 se han concedido
51 préstamos sociales por un importe total de 39.000 euros, también se ha
sustituido el contador comunitario por individual en más de 1.100 viviendas, mejorando el control de un consumo más eficiente, aportando más de
130.000 euros en ayudas directas a la individualización de estos contadores.
Durante este 2020 y debido la situación de alerta sanitaria, se han habilitado y reforzado
canales de pago en remoto para evitar los desplazamientos; telefónicamente, mediante transferencias bancarias de cualquier importe o a través de canales virtuales. Hasta la fecha se han realizado entre oficinas de atención presencial y canales telemáticos
casi 130.000 gestiones de cobro.
Además, otras medidas consolidadas desde años anteriores en Emasesa se han reforzado durante la pandemia, como la
flexibilización de las condiciones de pago, asistiendo a los usuarios para la
búsqueda de soluciones personalizadas que permitan poder atender las facturaciones de agua de forma cómoda y a su alcance.
Un referente en las buenas prácticas
El
servicio prestado, la calidad del agua y saneamiento suministrado, así como todo el
abanico de ayudas y garantías expuesto, está
muy por encima de los estándares reconocidos y recomendados a nivel internacional por Naciones Unidas y la OMS.
Estas buenas prácticas hacen de Emasesa un referente a nivel nacional y autonómico en la aplicación de políticas sociales y económicas que permitan el derecho y acceso al agua en su más amplio sentido.
Toda la información en
www.emasesa.com