La Fiscalía de Estambul ordenó hoy la detención de 360 personas por presuntos vínculos con la organización del clérigo islamista Fethullah Gülen, a quien Ankara responsabiliza del fallido golpe de estado de julio de 2016, informa el diario Hürriyet.
Al menos 216 de los sospechosos son soldados en activo, mientras que el resto habían sido suspendidos o despedidos previamente al amparo del estado de emergencia, en vigor desde julio de 2016, y que da mayores poderes al Gobierno.
"La Oficina del Fiscal General ha ordenado la detención de 360 sospechosos en relación con la investigación de la estructura de las Fuerzas Armadas y el Departamento de Policía", informó la Fiscalía en un comunicado.
La Fiscalía sospecha que al menos 27 de los sospechosos actuaban como imanes en el Ejército, encargados de mantener relaciones entre los seguidores gülenistas y dirigentes de la organización.
Las fuerzas de seguridad creen que al menos 10 de los sospechosos se encuentran fuera del país.
Más de 8.500 miembros de las Fuerzas Armadas, entre ellos 150 generales, han sido expulsados por sus presuntos vínculos con la cofradía del predicador islamista.
Esta cifra supone aproximadamente el 3,5 % del personal militar de Turquía y la mayoría de ellos ha sido o está siendo juzgados por golpismo.