Lo que opina la calle sobre el acto de coronación del Valle

Publicado: 05/11/2008
La mayoría cree que la Hermandad tuvo poco tiempo para prepararlo
Hace ya casi una semana que la Virgen del Valle fue coronada canónicamente, aún perdura en la ciudad el recuerdo de tan solemne momento y los jerezanos opinan sobre diversos aspectos de la coronación. En la calle está sobre todo el reconocimiento a los hermanos del Cristo. El trabajo y el esfuerzo para afrontar un acto tan solemne y deseado en tan sólo un año. No olvidemos que la concesión se supo a través del decreto de monseñor del Río que leyó el delegado diocesano para hermandades y cofradías Joaquín Perea. La apreciación por lo general del cofrade de a pie es que se le concedió poco tiempo a la hermandad para preparar todos los actos relacionados con la coronación. Sirva de ejemplo de algo más de permisividad en cuanto a fechas, que la Virgen de Regla de la hermandad sevillana de los Panaderos recientemente ha recibido la aprobación del cardenal Amigo, sin embargo tendrá dos años para preparar la ceremonia y todos los acontecimientos previos.
Es innegable que la ceremonia es difícil de mejorar. Se podrá hacer igual, pero difícilmente será superable, motivo por el que hay que dar la más sincera enhorabuena a los cofrades del Cristo y así lo reconoce el grueso de los cofrades de Jerez.
También está en la calle lo de siempre. Todo lo relacionado con los que hablan sin saber. Que si es un despilfarro, que con todas las necesidades que hay, etc. Los que generalizan a la ligera sin ver el fondo, no se enteran o no quieren enterarse de detalles, para ellos tan nimios, como los movimientos que realiza anualmente la Bolsa de Caridad Virgen del Valle, que abastece a muchos necesitados de la ciudad. No quieren estar al tanto de las obras sociales de la hermandad del Cristo en los salones parroquiales de la humilde iglesia de  San Rafael, que cubre una de las zonas más deprimidas del barrio. Tampoco quieren saber que todo, absolutamente todo, el oro de la corona ha sido donado por fieles y devotos que han entregado con todo su cariño joyas que en muchos casos se han heredado de generación en generación.
Por último y lo más comentado, el altar montado para la coronación canónica de la Virgen del Valle. Habría que  aclarar que éste no era el diseño de la mayordomía de la hermandad del Cristo. Con la colaboración de Luis Becerra, asesor artístico de la hermandad de la Macarena y colaborador en el montaje artístico de exposiciones de Cajasol, la Virgen debería haber estado arropada por un dosel que tuvo que ir de vuelta para San Telmo, e iluminada por dos candelerías completas, en lugar de cuatro puntos de luz y cuatros jarras de flores, que es  lo que accedió a consentir el cabildo catedralicio, a la sazón padrino de la coronación.
Lo único que queda en claro es que hay que felicitar a la hermandad del Cristo y a sus cofrades por el trabajo, por la ilusión y por el esfuerzo por que todo saliera a la perfección, algo que sin ningún tipo de duda han logrado.


Detalles del regreso de la Virgen

La procesión de retorno de la Virgen del Valle Coronada a San Telmo se iniciará el sábado a las cinco de la tarde. Contando con el acompañamiento musical de la banda  de Palomares de Trebujena tras el paso y el de la banda de cornetas y tambores de Arriate (Málaga) delante de la Cruz de Guía, transcurrirá por el reducto Bueno Monreal, Cruces, Arroyo, Obispado, Curtidores, Barranco, plaza Peones, Carpintería Baja, para encarar la puerta principal de la basílica que cobija a la primera Virgen coronada en la ciudad, la del Carmen, donde los hermanos del Cristo harán una ofrefnda a la Virgen. Encarará la calle Sedería para llegar a la plaza de la Asunción donde estará esperando el Ayuntamiento que hará entrega de un presente a la Santísima Virgen. En la calle Consistorio se le lanzará una petalada promovida por el Ayuntamiento. La petalada se repetirá en la Puerta Real, esta vez como detalle de la hermandad para despedir a las corporaciones que le han acompañado. En la Cruz Vieja, la entrada simbólica a San Telmo, la Virgen cruzará por el arco que la dejará en su barrio, bajo una tercera petalada. Una alfombra de sal en la que han colaborado las hermandades de San Miguel, Prendimiento, Soledad, Soberano Poder y Estrella, hasta Galván le servirá de entrada a la Virgen, que estará escoltada por columnas con macetones, reposteros en los balcones cedidos por la Amargura de Sevilla y una estampa del Cristo. Y estará en su barrio.


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