El líder del PP ha negado que haya un sector del PP enfadado por el pacto alcanzado
Tras el acuerdo para renovar el Poder Judicial, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido comprensión a todos aquellos que de buena fe piensan que no se puede pactar con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y les ha dicho que él no ha pactado con el socialista, sino que ha pactado proteger al Estado.
En una entrevista mantenida este jueves con EsRadio, Feijóo ha señalado que es verosímil que el PSOE haya pactado la renovación del Consejo General del Poder Judicial para intentar dividir en la derecha, pero ha abogado por que eso no ocurra.
"Hay gente que de buena fe cree que con Sánchez no se puede pactar nada, pero yo no he pactado con Sánchez, he pactado profundizar en la independencia judicial, he pactado blindar de cualquier asalto como el Tribunal Supremo, he pactado un asunto de Estado para proteger al Estado y espero que lo entendamos todos así", ha afirmado.
Y ha lanzado un mensaje velado a Vox, sin mencionar a este partido, cuando ha dicho que "no tiene sentido" que la oposición tenga como objetivo hacer "oposición a la oposición".
Además, Feijóo ha defendido que "no hubo dificultad" con los presidentes autonómicos de su partido a la hora de pactar y que "como no puede ser de otra forma", porque conocen su responsabilidad, no tuvo "un atisbo de duda ni una tacha".
El líder del PP ha revelado que habló con los dirigentes territoriales de su partido a partir de las 17.00 horas del martes, una vez que ya tuvo "el ok" de que la negociación había llegado a buen puerto porque hasta entonces fue "prudente" y no lo dio por cerrado.
Feijóo ha negado que haya un sector del PP enfadado por el pacto alcanzado, al tiempo que ha admitido que sí había un "enorme escepticismo" porque la otra parte había dicho cosas que no había cumplido.
El líder de la oposición ha dicho además que no ha hablado con el presidente del Gobierno para cerrar el acuerdo del CGPJ porque "no es fácil", y ha recordado como en otoño de 2022 la negociación se rompió porque Sánchez estaba negociando una "bajada de pantalones" con los separatistas, en alusión a la eliminación del delito de sedición del Código Penal.