La denuncia que el PP anunció que iba a presentar contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ante la Oficina de Conflictos de Intereses no tiene ningún recorrido jurídicamente, según han advertido este jueves fuentes del PSOE, que indican que el PP lo sabe, pero utiliza instituciones públicas para intoxicar.
El PP señaló el miércoles, tras la sesión de control en el Congreso, tras hacer referencias Sánchez al presunto fraude fiscal de la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que este jueves iba a denunciarle a él ante la Oficina de Conflictos de Intereses por los supuestos vínculos de su esposa, Begoña Gómez, con algunos investigados del caso Koldo y la aerolínea Air Europa.
Según el PP, Sánchez tuvo que haberse abstenido en los consejos de ministros que trataron el rescate de Air Europa durante la pandemia, porque Gómez había tenido reuniones de negocios con dirigentes de la aerolínea.
El PSOE ha señalado que jurídicamente no tiene recorrido esa denuncia porque la norma por la que se rige la Oficina de Conflictos de Intereses es absolutamente clara y solo obliga a abstenerse en el caso de que un familiar sea directivo o asesore a la empresa sobre la que se decide, lo cual no ocurrió en absoluto en este caso.
Por tanto, es evidente que si el PP presenta esa denuncia, conociendo que no tiene ninguna base jurídica sólida, su única intención será tratar de confundir a la ciudadanía.
De hecho, ya hubo una denuncia similar de un ciudadano y la Oficina de Conflictos de Intereses no la admitió, apuntan en el PSOE.
El PP, pues, según los socialistas, va a hacer una instrumentalización espuria de una institución pública, algo que, si ocurriera en un órgano judicial, podría llevar a que le condenasen en costas por mala fe al denunciar, aunque no se dé el caso al ser la Oficina un órgano administrativo, dependiente de la Secretaría de Estado de la Función Pública.