Casi un mes después, las personas que obtuvieron las certificaciones y los títulos a través de ese pseudo sindicato, siguen, en su mayoría, sumidas en una profunda preocupación, al tiempo que hay muchas que siguen ejerciendo una labor que sólo podría realizarla si de verdad están en posesión de una titulación y no de un documento falso que en la mayoría de los casos se obtuvo sin asistir a clases, ni teóricas, ni prácticas, y sólo mediante el abono de cierta cantidad de dinero.
Uno de los casos más preocupante lo ha descubierto este periódico en la localidad de San José del Valle, regido por el Partido Popular, donde la mayor parte del personal contratado por el Ayuntamiento para realizar labores de Ayuda a Domicilio, ejerce gracias a títulos expedidos por el citado Sindicato de Trabajadores de Cádiz.
Una de estas mujeres, Eva María Lerena, explica, parte por parte, la odisea que está viviendo desde que supo que su título de Auxiliar de Ayuda a Domicilio, seguramente sea falso porque “está firmado por dos personas que han sido detenidas en el transcurso de la operación”, pero sobre todo, “porque yo no di ni clases, ni recibí prácticas, sólo rellené un test y pagué 100 euros”.
Una historia real
Eva María Lerena recuerda que todo comenzó cuando “fui a pedir un puesto de trabajo al Ayuntamiento (de San José del Valle) y me dijeron que no había nada, que sólo ofertaban empleos relacionados con la ayuda a domicilio, con lo que me aconsejaron hablar con Pepi Barrones”, que es la concejal delegada de Asuntos Sociales en este municipio.
“Entonces fui a hablar con ella (con la edil)”, explica Eva María, “y me dijo que necesitaba un título de auxiliar de Ayuda a Domicilio, y me dijo que para conseguirlo con rapidez tenía que abonar 100 euros para que me mandaran unos libros, aunque se ofreció a darme los fotocopias de los mismos y las respuestas de los test que me iban a pedir”.
Tras esta información “ingresé el dinero en la cuenta del Sindicato de Trabajadores de Cádiz (Sitca) y a los tres días me llegaron los libros y los test, los cuales rellené sin copiarme porque tenía la voluntad de aprender”. Luego “remití el test y a la semana me llegó a una carta con la certificación de ‘Apta’ y a los quince días me llegó el título, el cual llevé al Ayuntamiento y a la semana comencé a trabajar en Ayuda a Domicilio”.
Al cabo de un tiempo, mientras realizaba sustituciones, “me entero por el telediario que se había destapado una trama centrada en el Sitca. Me quedé boquiabierta, sobre todo cuando a la mañana siguiente leí en el periódico que los detenidos eran los que firmaban mi título”, recuerda la propia Eva María.
Esta vecina de San José del Valle decidió acudir al Ayuntamiento para comentarles la situación en busca de orientación. “Me atendió la secretaria del alcalde y me dijo que no sabían nada, que me esperara a ver cómo iban sucediendo las cosas”, explica a este medio para luego añadir que también “se lo comenté a mis compañeras de trabajo, de las cuales una treintena están trabajando gracias a un título otorgado por el Sitca. Les dije que el título era falso, que los que lo firmaban estaban imputados”.
Al cabo de unos días, “la concejal de Asuntos Sociales me reprendió y me dijo que por qué iba yo hablando de ese tema con las compañeras de trabajo. Le dije que sólo estaba preocupada y que sólo estaba comentando una verdad como era que los títulos eran falsos. Fue entonces cuando me dijo que me callara la boca, que era un pueblo chico y que aquí nadie se iba a enterar de nada”.
Ante semejante conversación con la concejal de Asuntos Sociales, Eva María señala que “le contesté que estaba equivocada porque la Guardia Civil tendría acceso, durante la investigación, a la cuenta bancaria, en la que yo había realizado el ingreso de 100 euros, e iban a saber que los títulos como el mío eran falsos y que pertenecían a la estafa, además de que había constancia de los nombres, las direcciones y las cuentas bancarias de todas aquellas personas que pagamos por el título”.
También “se lo comenté a la asistenta social que era quién nos contrataba. Le expliqué mi inquietud. Le pregunté qué pasaría si la Guardia Civil me llama, quién me iba a devolver el dinero, algo que no me importa pero sí el título. Es decir, estoy sin dinero y sin título. Me contestó que no me preocupara, que son muchos los títulos que había realizado de la misma forma y que cuando me llegara una carta del juzgado que se la llevara al Ayuntamiento porque ellos se harían cargo de todo”.
Tras estas gestiones, Ana María Lerena decidió que no podía confiar en el Ayuntamiento, (“pensé que se iban a lavar las manos y que sería mi palabra contra la suya”), y se puso en contacto con José María García (presidente del partido Agrupación Vallense, en la oposición). Este hombre “me comentó que me podían denunciar por estafa porque estaba ejerciendo una profesión con un título falso”. Además, “tenía miedo que al trabajar con personas mayores, si algo le pasara a alguna de ellas sería yo la responsable y encima no tengo título, con lo que me podía arruinar la vida”.
El título que ostenta Ana María Lerena certifica 130 horas lectivas comprendidas entre el 15 febrero al 15 de abril a pesar de que “yo sólo tuve que rellenar un test y pagar 100 euros. Incluso me ofrecieron no hacer el test. Lo hice por aprender, pero ni hice prácticas, ni nada de nada, con lo cual no sé realizar primeros auxilios aunque se supone que sí porque trabajo con personas en situación de dependencia”.
Al preguntarle sobre quién le puso en contacto con el Sindicato de Trabajadores de Cádiz, Eva María explica que “desde el Ayuntamiento me pidieron este título, fue la concejal de Asuntos Sociales quien me dijo cómo y dónde tenía que hacer el ingreso y cómo lograr el título de una forma rápida”
Ana María Lerena también acudió a la Guardia Civil para comentarle su caso y está pendiente de una respuesta de la Benemérita, aunque se ha cumplido el plazo de quince días que le dijeron que esperara por lo que en esta semana decidió formalizar la denuncia correspondiente.
El alcalde “sabe qué ocurre”
Respecto a si el regidor vallense tenía conocimiento de su situación y la del resto de trabajadores, Eva María señala que “yo le comenté al alcalde (Antonio García Ortega, PP) mi situación y que los títulos eran falsos pero no ha hecho nada. Si él fuese otro, hubiera convocado una reunión para explicar a las treinta o cuarenta personas que tienen estos títulos cuál es la situación y poner una denuncia conjunta, o al menos ponerlo en conocimiento de la Guardia Civil porque todos somos estafados y porque no puede tener a treinta mujeres trabajando en Ayuda a Domicilio con títulos supuestamente falsos como ya se ha comprobado y ha salido en todos los medios de comunicación”.
Desde el Ayuntamiento sólo “me comentaron que hasta que no se demuestre que son falsos, ellos no iban a actuar a pesar del riesgo que supone tener trabajando a gente que no han hecho prácticas en primeros auxilios en una labor tan delicada como es ayuda a personas mayores”.
Al preguntarle de nuevo quién le puso en contacto con el Sitca para que le diesen el título, Ana María Lerena, responde directamente: “el alcalde y la concejal de Asuntos Sociales”. Desde el Ayuntamiento han negado tal hecho, y señalan que la culpa fue del ‘boca a boca’ e insisten que “muchos de los títulos no son falsos”.
En este sentido, la concejal de Asuntos Sociales, Pepi Barrones, señaló a este periódico que el hecho de que haya tanta gente en San José del Valle contratada por el Ayuntamiento con títulos certificados por el Sitca, es que entre los trabajadores se propagó la facilidad de obtención de los diplomas “de ‘oídas’, por el ‘boca a boca’, por eso se han realizado los cursos con el Sitca y lo llevan haciendo desde hace diez años”
“Nosotros pedíamos un título y ellas nos lo han traído, aquí no hay estafa ni por parte de las trabajadoras, ni por parte del Ayuntamiento”, señala para concluir la concejal responsable de Asuntos Sociales del Consistorio. Además, “nadie se ha puesto en contacto con nosotros para decirnos que esos títulos son, o no, falsos”.
“Le hemos dicho a las trabajadoras que no se preocupen”
Pepi Barrones, concejal de Asuntos Sociales en el Ayuntamiento de San José del Valle, defendió la actuación del Ayuntamiento al señalar que “nosotros pedimos la documentación que nos exige la Diputación Provincial o la Junta para la labor de Ayuda a Domicilio como es el graduado escolar y un curso de Ayuda a Domicilio”.
Barrones afirma que “aquí hay muchos trabajadores que tienen cursos realizados con el Sitca desde hace diez años y están homologados”, ya que “me estuve informando y me dijeron que todos los cursos certificados por el Sitca no son falsos o ilegales, hay algunos válidos”.
La edil señala que “estamos esperando a que nos llegue alguna notificación sobre la falsedad o no de estos títulos, y si se confirma que no son legales, desde el Ayuntamiento, al personal que tenemos trabajando, ya buscaríamos la manera de ofrecerles el curso nuevamente por otras vías”. Y es que “los trabajadores no tienen por qué preocuparse, nosotros respondemos por ellos porque para eso los tenemos contratados.
Hasta que no nos aseguren que la estafa es real y los títulos son falsos, no podemos hacer nada… sólo sabemos que los interesados pagaron un dinero, recibieron unos libros, realizaron un examen, y obtuvieron el título”.
Eso sí, “no sabemos si el título es falso, y si lo fuera, el Ayuntamiento ya buscaría una solución” y explica que “nos han llegado unas siete trabajadoras preocupadas, pero les dijimos que estuviesen tranquilas, que ellas hicieron sus exámenes y no han estafado a nadie”, concluye.