el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, defendió a la España libre y como nación, emanada de las Cortes de la Isla de León de 1810 y plasmada en la Constitución de Cádiz 1812.
Lo hizo en un discurso valiente, ameno y donde demostró su valía como político. Bono quiso aclarar previamente que todas su manifestaciones las hacía como diputado por Toledo y a título particular “que no quiero corresponsabilizar a nadie”.
Emocionado tras su visita a la iglesia Mayor parroquial, lugar del juramento de los diputados a Cortes, donde firmó en el libro de honor del Ayuntamiento y de la iglesia, el presidente del Congreso de los Diputados descubrió el nuevo rótulo que identifica la calle Las Cortes de la Real Villa de La Isla de León.
Ya en el Real Teatro de Las Cortes, que este año vivía el acto institucional en horario vespertino, Bono fue recibido entre aplausos y ofreció un discurso que se recordará por su defensa de la nación española y sobre todo por el reconocimiento de las Cortes de La Isla de León de 1810 y la Constitución de Cádiz de 1812 como base del sistema de libertades y derechos de España.
Bono recordó que “tal día como hoy, hace 199 años, se instalaron en este mismo lugar las Cortes que iniciaron el régimen liberal español y constituyeron un hito político en la historia de España, del que hoy somos directamente herederos”. Bono aludió al Bicentenario de la Guerra de la Independencia, al próximo de las Cortes de la Isla de León y al Bicentenario de la Constitución de Cádiz, “no son solamente ocasiones para la nostalgia o recuerdo. Lo que recordamos es ni más ni menos que el nacimiento desde el punto de vista político y en libertad de una de las naciones más importantes del planeta, de una de las naciones sin la cual el mundo estaría incompleto”.
Durante su intervención, José Bono apeló al orgullo que debe suponer la patria, “motivos de orgullo que tienen que ver más con el sentimiento que con la razón”. “Se imaginan un mundo sin 400 millones de seres humanos que hablen el idioma de Cervantes, se imaginan un mundo sin Velázquez, sin Miró, un mundo, ponga el ejemplo, el nombre que deseen, un mundo que no hubiera tenido la fuerza y el impulso de con tres carabelas ir a descubrir lo que se consideraba desconocido. El mundo estaría incompleto sin España”.
El presidente del Congreso de los Diputados aseguró que “es bueno que fechas como las de hoy, nos hagan pensar que no perdemos del todo el tiempo, aunque para algunos resulte más incómodo que para otros, evocar el nombre de España y evocarlo justo en el sitio donde la nación, comenzó a nacer como nación moderna”.
En este sentido, abundó en que “en momentos como hoy, no podemos perder el tiempo” y así hizo alusión al “grito de viva España y viva la nación”, que consta en el libro de sesiones de las primeras Cortes españolas, y al nacimiento del parlamentarismo español e iberoamericano.
José Bono hizo balance de los presidentes del Congreso desde el primero de las Cortes de La Isla de León hasta hoy. Así, recordó que desde 1810 hasta este 199 aniversario de las Cortes ha habido 76 elecciones generales y 144 presidentes del Congreso, de los cuáles, 6 lo fueron en la Isla de León y 31 en Cádiz, “y a mi me cabe el orgullo de ser el último”.
Dijo del lema del Bicentenario, Cuando España fue una Isla, al que calificó como “sugestivo”. En su discurso habló del monarca Fernando VII y del papel de la Iglesia, recordando asimismo los obispos y sacerdotes que formaron parte de las primeras Cortes.
Bono alabó el papel jugado por La Isla y Cádiz, “una sociedad muy rica, la isleña y la gaditana, fermento y levadura de libertad”.
En su intervención, habló sobre el cuadro de Casado del Alisal que permanece en el Congreso de los Diputados y que refleja el juramento de los diputados de Las Cortes de 1810 en la iglesia Mayor de San Fernando, antes de su constitución en el Teatro de Las Cortes.
No faltaron las alusiones a grandes protagonistas de las primeras cortes españolas como Lázaro de Dou, Muñoz Torrero o Argüelles, quien exhibió ya en 1812 al pueblo de Cádiz la Constitución de 1812. Así, destacó las palabras de Argüelles que por un lado identificaron la patria y la nación con la libertad.
El alcalde de San Fernando, Manuel María de Bernardo, reivindicó el papel histórico vivido por la sociedad isleña hace 199 años. En este sentido, De Bernardo habló del primer Parlamento que “promulgó a partir del 24 de Septiembre de 1810 decretos relativos a la Soberanía Nacional, la división de poderes, la igualdad y la legalidad o la libertad de imprenta, entre otros, que sentarían las bases del Estado Democrático y de Derecho, el fin del antiguo Régimen y el inicio de un nuevo tiempo para los españoles de los dos hemisferios, la Península e Iberoamérica”.
“Reivindicamos nuestra contribución a la Historia, al Parlamentarismo, al Estado Constitucional y el papel de los isleños y las isleñas durante la Guerra de Independencia en la defensa frente al asedio de las tropas invasoras”, señaló el primer edil isleño, antes de dar paso al presidente del Congreso de los Diputados, José Bono Martínez, que habló de la Las Cortes de 1810: el nacimiento de la España constitucional.