El jefe del Ejecutivo andaluz ha adelantado en estos términos algunas de las líneas en la que incidirá su gobierno para aplicar en la comunidad los ajustes anunciados por el Gobierno central, que ha calificado de "responsables y necesarias" para reducir el déficit público y "consolidar" la recuperación económica.
En la sesión de control al Ejecutivo, Griñán dijo en respuesta a las críticas del portavoz de IU, Diego Valderas, que el plan de estabilización de la Junta se presentará y debatirá en el Parlamento autonómico antes de que en junio se celebre la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), en el que la comunidades acordarán con el Gobierno medidas de recorte en las autonomías.
Previamente, Diego Valderas calificó de "infames" las medidas anunciadas por el Gobierno central, en lo que definió como el recorte "más duro de la historia de la democracia".
Después de recordar que el martes el Ejecutivo andaluz aseguró que el ajuste "no sería abrupto", el dirigente de IU aseguró que el Gobierno y la Junta "atacan a los más débiles, a trabajadores y pensionistas", aunque también aventuró que se verán afectados "negativamente" a recuperación económica y el empleo.
Valderas ha esgrimido el "cambio" de posición del presidente Rodríguez Zapatero que "se negaba a recortar las políticas sociales y ahora hace todo lo contrario", y ha advertido que a los socialistas "se ha acabado el crédito al abandonar aquí y en Madrid" a los que le apoyaron en la urnas.
"Estamos ante un mazazo a los más débiles, ante el recorte en el gasto social que antes era sagrado y ante una salida de la crisis con políticas de derechas", ha enfatizado.
El portavoz ha acusado a Griñán de "mentir" sobre la situación económica y ha considerado que sus planes económicos ponen "entredicho" la concertación social, las leyes locales y la inversión pública, lo que atribuyó a la "mutación ideológica vergonzosa" del PSOE.
El presidente ha replicado que no le enfadaban los calificativos del líder de IU porque lo "desmesurado de sus juicios no me ofende", y ha ratificado que su gobierno asumirá los planes de Zapatero para reducir el déficit mediante medidas "razonables e imprescindibles".
En su intervención, aludió a los últimos acontecimientos en los mercados financieros y al "ataque" al euro, aunque también justificó los recortes en la idea de situar el déficit en el 3 por ciento del PIB en el 2013, por lo que consideró que la "senda no es brusca".
"Andalucía estará integrada en el esfuerzo de la estabilidad financiera", ha sentenciado el presidente, que pidió a la oposición su apoyo al plan de estabilización del gasto de la Junta, del que aseguró que "no afectará" a las políticas sociales ni a la ley de dependencia.
Valderas, sin embargo, cuestionó este compromiso del presidente y sostuvo que "ya" se han producido recortes en educación, empleo, en el plan Proteja o en los fondos a los ayuntamientos, y ha recordado que el Gobierno "debe 300 millones" a la Junta en la financiación de la dependencia.
Ha instado a Griñán y a Zapatero a "meter la tijera" en los beneficios bancarios, a recuperar el impuesto de patrimonio y a recortar las subvenciones a la Iglesia, a la Casa Real o los gastos en comunicación y publicidad, y "no en las pensiones".
El presidente invitó a Valderas a plantear ese discurso en el Congreso de los Diputados y le recordó que la Junta "no da ni un duro ni a la Iglesia ni a la Casa Real".
"Todos, también las corporaciones locales, tendremos que hacer ajustes porque no todos han hecho la misma política en el gasto", ha apostillado Griñán.
