Jerez despidió ayer una de sus fiestas moteras más tranquilas de los últimos años, que se ha caracterizado por la ausencia de accidentes graves tanto en el entorno del Circuito como en el casco urbano, a excepción del que sufrió un vecino de Jerez la noche del viernes cuando regresaba a su domicilio tras caerse de su motocicleta. No obstante, pese a que sigue ingresado en la UCI del Hospital de Puerta del Mar en “estado grave”, su evolución es favorable, según informaron fuentes del Servicio Andaluz de Salud. Pese a que la noche del sábado al domingo suele ser tradicionalmente una de las más aparatosas a nivel de accidentes y sucesos, salvando el impacto que sufrió un motorista en Chiclana, cuyo estado no reviste gravedad, el Hospital de Jerez atendió a tres motoristas de 40, 42 y 45 años por caídas, que fueron dados de alta en la misma noche, mientras que el resto de las asistencias se limitaron principalmente a intoxicaciones etílicas. Así, en el entorno del trazado de velocidad el 061 y la Cruz Roja realizaron casi un centenar de intervenciones durante toda la noche, aunque todas de carácter leves, a las que se sumaron otras otras ochenta durante el día de ayer. Asimismo, dos menores resultaron heridos leves en la Avenida de Cerrofruto al caer de la motocicleta en la que iban juntos tras colisionar con un vehículo, siendo trasladado al Hospital de Jerez, donde durante el día atendieron a una decena más de motoristas, procedentes de las inmediaciones del Circuito, con heridas de carácter leve, por lo que recibieron el alta casi en el momento. A nivel de denuncias, el fin de semana se ha saldado en el entorno del Circuito con más de un centenar de actas por tenencia de drogas, acampada ilegal y posesión de arma blanca, varias detenciones por consumo de drogas y una treintena de denuncias por delitos contra la seguridad vial y dos detenidos por delitos contra la salud pública.

Mientras tanto, en la ciudad, la que debería haber sido una de las noches más fuertes y con más afluencia de público entre moteros y la noche fuerte de preferia con parte del alumbrado encendido de forma excepcional transcurrió sin altercados destacables, lo que no evitó la intervención de los agentes de la unidad de antidisturbios en las primeras reyertas oficiales de la Feria hasta altas horas de la madrugada. No obstante, ninguna de ellas pasó a mayores, si bien llamó la atención la presencia, para algunos jerezanos algo exagerada, de los funcionarios de la Policía Nacional en el Real de la Feria. Un Real en el que se vieron grupos de moteros aislados disfrutando del ambiente, que resultaron muy pocos en comparación con las expectativas que había depositado el Ayuntamiento. La jornada se cerraba tranquila y el domingo se presentaba en la misma tónica incluso una vez finalizadas las carreras en el Circuito de Jerez. Terrazas desiertas, avenidas vacías y bares cerrados, sobre todo en el centro, después de un fin de semana que les ha vuelto a dejar con la miel en los labios. Los moteros volvían a hacer acto de presencia pero para marcharse de una ciudad que en esta edición los ha recibido sin restricciones después de tres ediciones y que ha tenido que esperar a última hora de la tarde para ver un ambiente que se repartió entre las avenidas de Álvaro Domecq, Arcos y México, uno de los clásicos puntos conflictivos y que ni siquiera ha tenido que ser cerrada por complicaciones.

Por su parte, los motoristas han vuelto dado un mensaje de civismo al respetar los carriles habilitados para ellos en las grandes avenidas como Álvaro Domecq, la eterna favorita para los aficionados.
Por su parte, en su primer balance oficial, la alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez evaluó ayer “muy positivamente” el desarrollo del Gran Premio de España y advirtió que “será muy difícil superar los éxitos de este año tanto en lo deportivo como en la organización, donde todo ha sido espectacular con el podio para tres españoles y con el funcionamiento de los dispositivos de forma que ha sido posible evitar incidentes de extrema gravedad”.
Para Sánchez, el ambiente en Jerez “sigue marcando las diferencias”, mientras que subrayó el éxito del operativo de seguridad “porque no hemos tenido que lamentar ninguna desgracia personal. Ha valido la pena los esfuerzos de estos años- añadió- porque ya nadie se acuerda del pasado ni de las complicaciones históricas gracias a un trabajo con continuidad, rigor y en equipo”, sentenció.

La AUGC critica los horarios “inhumanos” de la Guardia Civil
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) criticó ayer que “otra vez, año tras año, vuelven a repetirse las nefastas condiciones de trabajo que tienen que sufrir, en exclusiva”, los agentes de la Guardia Civil durante la celebración del Campeonato del Mundo de Motociclismo en el Circuito. Asimismo, denunciaron los “horarios inhumanos” en los que trabajan por esta cita. “Volvemos a enfrentarnos a servicios de once o doce horas que tienen su comienzo en el circuito a las 6.,00 horas, sin saber cuándo finalizan. Todo ello, "sin contraprestación económica alguna, que crea un terrible malestar al tener que estar desde más temprano e irnos más tarde”, criticaron.