Se enfrenta a doce años de prisión por presuntamente dejar tuerto a su hijo de 6 años tras lanzarle un móvil, porque tenía ganas de “vengarse” de él
Una mujer ha reconocido hoy ante los magistrados de la Sección Tercera Audiencia Provincial de Almería que denunció en falso a su exmarido, que se enfrenta a doce años de prisión por presuntamente dejar tuerto a su hijo de 6 años tras lanzarle un móvil, porque tenía ganas de “vengarse” de él.
Así lo ha manifestado a preguntas de la abogada de su exesposo durante la vista oral celebrada este jueves, y ha añadido que también denunció al hombre por violencia de género en una causa en la que resultó absuelto, así como que éste cumple con el régimen de visitas establecido por el juez tras el divorcio, sin que se hayan producido incidentes.
Previamente, en respuesta al fiscal, ha señalado que el día en el que su hijo sufrió una herida en el ojo no vio lo ocurrido porque estaba en otra habitación para cambiar el pañal de otra de sus hijas, y ha precisado que el menor estaba con su hermano pequeño en el salón “jugando con el teléfono”.
“Supongo que (los dos hermanos) discutirían por el móvil” y en ese momento se produjo un accidente que derivó finalmente en la pérdida del ojo, ha dicho al fiscal, al que ha apuntado que denunció que el padre le había arrojado el móvil al niño porque “estaba mal”, ya que éste la había “denunciado a servicios sociales”.
En este sentido, la abogada del hombre le ha preguntado si tenía ganas de “vengarse de él”, a lo que ha respondido que sí, y ha contestado también de forma afirmativa cuando ésta le ha consultado si los problemas entre la pareja se debían a que su cliente le había pedido que ayudase a la economía familiar, que se escolarizase a los niños y fuesen vacunados, a lo que ella se negaba.
El hombre ha sostenido que fue un “día normal”. “No sabemos qué pasó. Mi hijo tiene síndrome de Asperger, no expresa como otros niños, sólo cuando es algo gordo (…) Creemos que fue el hermano. Aunque es más pequeño (…) tenía más fuerza. Creemos que forcejearon”, ha señalado.
Ha apostillado que su exmujer y él acudieron a ver qué pasó cuando lo escucharon llorar y lo vieron con sangre, así como que el hermano “estaba callado, asustado” mientras lo miraba.
La abogada del hombre ha pedido una sentencia absolutaria y que se deduzca testimonio por denuncia falsa contra la mujer, a la que ha acusado de actuar con un “ánimo espurio” y “necesidad de venganza”.
El hombre ha aprovechado su derecho a la última palabra para decir que sólo “traicionó” a su exmujer” al acudir a los servicios sociales sin que lo supiera porque no quería escolarizar a los niños. “El sistema la obligó a escolarizarlos y se sintió traicionada por mí, pero no soy una persona agresiva, soy un buen padre y hago lo que puedo”, ha mantenido.
Por su parte, el fiscal ha elevado a definitivas sus conclusiones, por lo que mantiene su petición de 12 años de prisión por un delito de lesiones agravado, y ha reiterado el relato de su escrito de calificación, en el que sostiene que los hechos tuvieron lugar a finales de agosto 2018 en el domicilio familiar, cuando el padre discutió con el niño.
El fiscal afirma que en esta riña el adulto cogió el teléfono y se lo tiró a su hijo, de forma que el terminal le dio en la cabeza y le provocó un estallido del globo ocular que derivó en la pérdida completa del ojo derecho.