Ni el madrugón, ni el calor infernal, ni la edad -buena parte eran pensionistas- y mucho menor la nueva normalidad postcoronavirus amilanaron este martes al millar de vecinos de Trebujena que se pegaron una buena caminata de 23 kilómetros en defensa de la sanidad pública.
La marcha, que partió a las 6.30 horas de un pueblo que cuenta con 7.000 habitantes, de los que una buena parte son personal sanitario, no podía culminar en otro sitio que no fuera el Hospital de Jerez, hasta donde llegaron ante un sol de infarto ataviados con las mascarillas de rigor, sin distancia de seguridad (se hacía complicado guardarla) y con gorros y botellas de agua para protegerse de las altas temperaturas.
Estas circunstancias adversas no fueron inconveniente alguno para que durante el recorrido a pie dedicaran su grito de guerra al presidente de la Junta, Juanma Moreno Monilla, “Bonilla, escucha, Trebujena está en la lucha”, decían, el mismo que entonaron cuando hicieron su aparición por las inmediaciones del Hospital de Jerez poco después de las 12.00 horas.
Una vez allí se concentraban a las puertas del edificio del Materno-Infantil para protestar contra la decisión de la Administración autonómica de derivar hasta 15 especialidades médicas de un total de 14 municipios de la provincia a hospitales concertados de Pascual. La marcha estuvo encabezada por el alcalde de Trebujena, Jorge Rodríguez (IU), que lamentó que durante el periodo de confinamiento en el que “la gente estaba aplaudiendo y pidiendo inversiones para la sanidad pública”, la Junta realizase esta “operación”.
Por su parte, el coordinador provincial de IU, Fernando Macías, advirtió de que no va a permitir “que la sanidad se convierta en un negocio”. Eso sí, Macías admite que el concierto con los hospitales del grupo Pascual “viene de atrás”, pero no está dispuesto a permitir “que se privatice la sanidad”. A la protesta también se ha sumado el coordinador general de IU Andalucía, Toni Valero, que calificó la iniciativa de “lección democrática”.
Tras la concentración ante el Hospital Materno-Infantil, los asistentes, entre los que también había vecinos de otras localidades como Medina Sidonia, rodearon las dependencias hospitalarias con un abrazo simbólico.
