Los municipios del litoral malagueño esperan a la fase 2 de la desescalada para la apertura al baño de las playas en un verano sin duda diferente y para el que están estudiando diversas medidas que permitan controlar accesos, aforos y la ocupación de estos espacios.
La mayoría de las localidades consultadas por Europa Press prevén utilizar aplicaciones móviles aunque también las hay que optarán por la inteligencia artificial o el uso de drones pero todos están a la espera de un protocolo al respecto por parte del Gobierno central y las directrices de la Junta de Andalucía, que cuenta con las competencias sanitarias.
En Málaga capital el Ayuntamiento, a través del Área de Playas, estudia diferentes medidas para poner en marcha y cuenta ya con una aplicación que podría implementarse también para el aforo de estas instalaciones; una 'app' que hasta ahora ha sido "muy útil para temas del estado de las banderas, medusas, etcétera".
"Esta es una de las muchas opciones que se barajan. Desde siempre, el servicio de Socorrismo ha contado también con megafonía que quizá en estos momentos pueda resultar de gran utilidad. Lo que sí se sabe seguro es que ni las duchas ni los lavapiés van a funcionar para evitar el contacto directo", indican a Europa Press desde el Ayuntamiento de Málaga.
En Marbella, la directora general de Playas del Ayuntamiento, María Victoria Martín, sostiene que la localidad encara el regreso de los bañistas "con prudencia, trabajando desde un primer momento para que la vuelta a las playas se realicen con todas las garantías de seguridad". Así, ha apostado por tener en cuenta los diferentes escenarios "para actuar de una forma u otra, con medidas que pasan por la utilización de una 'app' para controlar el aforo y drones para mantener la seguridad en las playas".
En el caso de Fuengirola están volcados con una herramienta de inteligencia artificial, un programa informático desarrollado por la empresa local Juma que permitirá disponer de información en tiempo real sobre el nivel de concurrencia de personas en diferentes lugares a fin de evitar aglomeraciones así como minimizar el riesgo de posibles contagios del COVID-19. Pese a ello, insisten en que están esperando las medidas definitivas que dicten las autoridades sanitarias.
En Benalmádena, el alcalde, Víctor Navas, ha lamentado que a dos semanas de que se prevea abrir las playas, ya que se estima entre el 8 y 10 de junio, no tengan claro cómo llevar a cabo el control pero ya ha advertido de que la Policía Local no va a sacar a bañistas o familias de las playas, responsabilidad que deja en manos de cada persona.
"A los ayuntamientos se nos ha dejado una responsabilidad que es mantener el aforo pero no podemos caer en el error de tener que prohibir el acceso o sacar a bañistas o familias con la Policía Local. Están descargando en nosotros una responsabilidad que no nos corresponde", opina.
Así, añade que conocen el número máximo de personas que pueden entrar en sus playas y están estudiando habilitar una aplicación en la que el propio usuario vea cuáles cumplen en ese momento el aforo y cuáles no. En este punto, señala que la Diputación informó de una aplicación para el control de los accesos "pero no tenemos noticias y no sabemos si suscribiremos esa o contrataremos la que mejor nos venga".
Navas puntualiza que se podría implantar el control de accesos con efectivos de Protección Civil pero avisa de que no son autoridad: "Si un bañista quiere entrar se le va a recomendar pero no vamos a discutir ni mandar a la Policía Local porque sería una imagen desastrosa para un destino turístico como el nuestro". "Pedir esto es una quimera porque en julio o agosto quién dice a una persona que no puede acceder a la playa", añade.
En definitiva, el alcalde pide que se articulen medidas por parte de la Junta de Andalucía "que es quien tiene las competencias sanitarias por si surge la necesidad por rebrote y hay que actuar para contenerlo".
También en Estepona están a la espera de que se establezcan las medidas concretas de control de aforo y aseguran que en cuanto se conozcan el Ayuntamiento pondrá los medios necesarios para cumplirlas "al igual que ha hecho con el resto de medidas que se han ido decretando durante el estado de alarma".
El Ayuntamiento de Mijas, por su parte, tiene previstas varias iniciativas para poner en marcha de cara a la próxima apertura del litoral aunque está pendiente de que el Gobierno central articule un protocolo que recoja la normativa básica a seguir. Mientras tanto, trabaja con las recomendaciones de la Junta de Andalucía.
"Pondremos a disposición todos los recursos de la administración local para garantizar la seguridad de los usuarios. Para nosotros es esencial velar por la salud de vecinos y visitantes además de relanzar nuestro turismo", explica el concejal de Playas, José Carlos Martín, quien avanza que tienen diseñado un plan "pero no podemos realizar grandes inversiones hasta que no nos den la certeza de que las medidas van a cumplir la nueva legalidad que estipule el Gobierno central".
Lo que sí han adelantado es que habrá un refuerzo de personal así como nuevos sistemas tecnológicos para el control del aforo. "Estamos gestionando el sello 'Safe Tourism Certified' contra el COVID 19 para la costa mijeña. Tenemos el trabajo hecho y solo nos queda que nos den luz verde", añade Martín.
En Torremolinos están elaborando el plan de contingencia solicitado por la Junta y la semana próxima habrá reuniones con sectores implicados para exponerles la situación y trabajar con ellos en una propuesta final.
Manilva, mientras tanto, contará con paneles en los diferentes accesos con la información relativa a la utilización de las playas. Además se diseñarán folletos para los usuarios y contarán con un plan de contingencia solicitado desde la Junta de Andalucía para el control de usuarios.
COSTA ORIENTAL
En la costa oriental, la situación es similar. El concejal de Presidencia y Seguridad Ciudadana de Rincón de la Victoria, Borja Ortiz, indica que el decreto de la Junta fija recomendaciones y sugerencias, dando libertad a cada uno de los ayuntamientos para implantar las medidas oportunas. "Todas las recomendaciones que nos vengan de todas las administraciones las vamos a tener muy en cuenta y luego cada municipio tiene su idiosincrasia y tenemos que aplicarlas", asegura.
En esta localidad, se reforzará el servicio de socorrismo, en el que se va a prestar especial atención a las medidas relacionadas con el COVID; además de poner un limpiador específico para cada baño público para que las condiciones higiénicas de los mismos "sean impecables en todo momento".
Además, crearán un servicio especial de vigilancia, cuyos miembros van a ir andando por la orilla y cuyo objetivo único va a ser que se cumplan esas medidas de distanciamiento y de colaboración ciudadana.
"También estamos dentro del proyecto 'Covid free' con la Diputación, a través de una aplicación móvil y podrá cualquier usuario saber cómo está el nivel de ocupación", recuerda, además de estudiar el uso de drones localizados con el sistema informático de la policía que ayude a controlar y vigilar mejor su litoral.
En Nerja señalan que se están estudiando todas las medidas, pero no se ha acordado nada todavía mientras en el Vélez-Málaga se trabaja en acciones "que no se pueden confirmar porque no sabemos si la Junta o el Estado van a darlas por buenas". Pese a ello, añaden, "se va a llevar a cabo control de aforo, distanciamiento social y para ello se van a poner una serie de medidas que ya se están barajando".
En el caso de Algarrobo están organizando y estudiando las medidas a implantar, estando a la espera de las indicaciones del Ministerio y del ICTE.