Un hermano de la Hermandad del Nazareno desde 1986 y que en 1983 ya figuraba como cargador, además de haber sido miembro de junta de gobierno, ha denunciado irregularidades de la hermandad al Obispado de Cádiz y Ceuta,obteniendo "siempre la misma respuesta por parte de arcipreste, sacerdotes, que pedían pruebas".
Hace poco llegó a su poder un censo electoral de la Hermandad, utilizado al parecer en las últimas elecciones de la cofradía para buscar el voto de los hermanos y asegura que no hizo nada para no enturbiar el quinario de Cuaresma.
Puso este tema en conocimiento del Obispado de Cádiz y Ceuta para que tomara medidas al respecto y obtuvo un margen de espera al Obispado, pero no hubo respuesta.
Este hermano dice que por parte del Obispado de Cádiz y Ceuta se asegura que dio traslado al Consejo de Hermandades y estaba pendiente de su informe, en concreto del delegado diocesano de Hermandades y Cofradías. Por su parte, desde el Consejo de Hermandades y Cofradías de San Fernando no se ha asegurado ni desmentido dicha afirmación, salvo que "no se pronuncian sobre el tema".
Ante la falta de respuesta del Obispado, este hermano ha denunciado a la junta de gobierno de la Hermandad del Nazareno ante la Agencia Española de Protección de Datos, por irregularidad en la custodia del censo de hermanos, siendo la base de datos de los 1.391 hermanos con derecho a voto, en 64 páginas donde figuran datos personales como nombres, apellidos, domicilios, fecha de alta, etc., afectando a su intimidad y en manos de no se sabe cuantas personas.
Se desconocen cuantas copias hay, pero sí se sabe que hermanos buscaban el voto con el censo en mano, si no, no se entiende que fueran a buscar a ese hermano a su domicilio.
La denuncia ha sido presentada hoy, algo que ya se ha puesto en conocimiento del Secretariado Diocesano de Hermandades y Cofradías, según palabras del denunciante.
"Tengo una cosa para ti"
Todo comenzó cuando este hermano fue visto por otro y le dijo: "tengo una cosa para ti". Y esa cosa era un censo de hermanos de 2015 utilizado para el último cabildo de la hermandad.
Este hermano asegura que por una fe de bautismo, se pide autorización con carnet o persona y un organismo como la hermandad, perteneciente a la Iglesia, no protege su censo.
Según el denunciante, este tema fue puesto en conocimiento del Obispado en mayo, y ha obtenido la callada por respuesta, por lo que ha decidido presentar su denuncia a la Agencia Española de Protección de Datos.
Entre los hechos, que constituirían una infracción a la normativa de protección de datos y que serían, por tanto, susceptibles de ser objeto de sanción, se encuentran los siguientes: Conseguir los datos personales de una persona de manera ilícita, de forma engañosa y fraudulenta. Utilizar los datos de carácter personal de una persona o comunicarlos a terceros sin su consentimiento, en particular si se trata de datos sensibles como la ideología, religión, creencias, origen étnico, salud, vida y orientación sexual y Utilizar los datos de carácter personal de una persona para fines incompatibles para los que fueron recogidos sin contar con su consentimiento.
Todo ello puede originar una importante sanción económica a la hermandad, lo que se sumaría al robo de dinero ocurrido en la casa de hermandad en octubre de 2017.
