Gallardón precisó en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su Gobierno, primera tras las vacaciones, unas declaraciones que había realizado horas antes en una entrevista en la cadena Ser, donde había asegurado que si no se consiguiesen los Juegos la “responsabilidad” sería exclusivamente suya.
A preguntas de los periodistas en la rueda de prensa, el alcalde ha reiterado por un lado que en su vida no ha dejado nunca de asumir sus “responsabilidades” pero por otro ha recordado que sus “compromisos” ya los tiene “adquiridos”.
“Los notifiqué además a mis compañeros de corporación y esos compromisos en el último debate sobre el estado de la ciudad decían claramente cuál era la respuesta que yo había dado a la petición de mi partido con relación a su propuesta de encabezar la candidatura para el año 2011”, subrayó.
De esta forma, el resultado de la suma de ambas premisas –“responsabilidad” y “compromiso”– es que serán “directamente los ciudadanos” los que juzgarían en 2011 las consecuencias de una nueva decepción en las aspiraciones olímpicas de Madrid.
“Quien tiene que juzgar las consecuencias de todas y cada una de las actuaciones políticas son directamente los ciudadanos”, afirmó Gallardón.