Los comerciantes de la plaza de abastos de Sanlúcar han comenzado ya a instalarse en el mercado rehabilitado de la Cuesta de Belén. El traslado se produce una semana después de los plazos marcados en principio por el Ayuntamiento y condicionado por el conflicto que ha enfrentado a Acoplasa - el colectivo en el que se integran - con el Gobierno municipal del PSOE.
El traslado al edificio rehabilitado, donde se han invertido más de 6 millones de euros en los últimos tres años - supone el cumplimiento del requerimiento que el pasado 28 de marzo llevó a cabo la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) a los detallistas del mercado para que cesaran su actividad en las instalaciones provisionales de la Calzada y tomaran posesión de sus nuevos puestos en la plaza de abastos de la Cuesta de Belén. Un trasiego que debería haberse realizado hace más de una semana y que tenía como objetivo que los detallistas pudieran abrir al público el pasado 26 de abril, y que quedó en el aire tras denunciar éstos que las nuevas instalaciones no reunían las condiciones de higiene y seguridad óptimas y que no se había tenido en cuenta las necesidades de cada uno de los concesionarios de los puestos, para llevar a cabo la obra.
Sin embargo, tras la denuncia ante los tribunales de lo contencioso administrativo solicitando la suspensión de este decreto - pendiente de resolver aún tras rechazar el juez las medidas 'cautelarísimas¡ de urgencia- el diálogo entre el Consistorio y los detallistas se rompió. El pasado viernes se produjo un acercamiento entre ambas partes que llevó a Acoplasa a suspender una concentración prevista para el pasado sábado, pero durante el puente festivo, no se han conseguido limar las asperezas, si bien los placeros han decidido retirar sus enseres de las instalaciones provisionales y comenzar a instalarse en el nuevo mercado después de que el Ayuntamiento de Sanlúcar les recordara que, de no hacerlo en el plazo de quince días, las concesiones de sus puestos saldrían a licitación, tal y como establece la ley.
Con todo, no ha habido un pronunciamiento oficial por ninguna de las partes implicadas en este conflicto, así como tampoco se baraja ni se ha anunciado ninguna fecha para la apertura del núcleo de la actividad comercial de la ciudad, que ya lleva diez días cerrado.
