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Viernes 15/11/2024
 

Arcos

El Arcos se la pega ante el Xerez y ya teme al abismo

Los del Barbadillo no se encontraron a sí mismos en todo el choque y dieron una triste imagen

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  • Pedro Carrión, ‘pichichi’ de Tercera junto a Chico Díaz, finiquitó el partido desviando un centro de Vega. -

Xerez CD    4
Arcos CF    0

Xerez:  Zamora, Gonzalo, Ángel, Guerrero, Chato, Israel (Juanma Aguilar, 85’), Javi (Paco Borrego, 70’), Chato, Juan Benítez, José Vega (Albino, 78’) y Pedro Carrión.

Arcos: Toni Lechuga, Mariño, Rubén (Jony, 61’), Oca, Joselito, Manzano, Zúñiga, Juan Gómez, David Narváez (Giráldez, 61’), Prieto (Legupín, 81’) y Antonio Sánchez. 

Goles:
1-0    m. 25: Chato
2-0    m. 47: Quirós
3-0    m. 64: Pedro Carrión
4-0    m. 90+1: Juan Benítez

Árbitro: José María Aranda Delgado (Málaga). Amonestó por los locales a Javi, José Vega e Israel y en dos ocasiones a Guerrero, al que expulsó en el minuto 82
Incidencias: Trigésima tercera jornada de Tercera División. Estadio Fernández Marchán. Unos 400 espectadores.

 El Arcos emborronó en Guadalcacín ante el Xerez CD del extécnico arcense Juan Pedro Ramos una de sus páginas más tristes y lamentables de las últimas temporadas, siguiendo en la dinámica (mejor decir estática) de las últimas siete jornadas, siete partidos fatídicos en los que el conjunto de Mariano Suárez no ha conseguido vencer a ninguno de sus rivales y en los que ha encajado 17 tantos por solo cuatro a su favor, con cinco derrotas y dos empates como paupérrimo bagaje, que se resume en una cifra aterradora: dos puntos de 21 posibles, una terrorífica balanza de puntuación que le hace asomarse al abismo del descenso a la División de Honor (¡menudo honor!), de la que ya solo le separan seis puntos, con un inquietante panorama de rivales a la vista, entre ellos el rutilante Ceuta de Zafra y Camps, que marcha a la busca y captura del líder, y en el que se las tendrá que ver contra otras tres escuadras que también pelean para evitar su caída al pozo: Onubense, Utrera y Castilleja, más la visita al Barbadillo en la última jornada del siempre amenazador filial sevillista.

¿Qué ha ocurrido hasta llegar a esta situación? La respuesta no es fácil porque ni siquiera los que que están dentro del club o los mismos técnicos, los que en teoría están llamados a explicar con todo lujo de detalles el desastre, son capaces de articular las causas de tanto desatino y despropósito: un equipo configurado “para ascender a Segunda B” desde el minuto 0 y que a falta de cinco jornadas tiene que pelear para amarrar la permanencia como mal menor. No es entendible. Siempre se ha dicho que el fútbol no tiene lógica, pero lo que le está ocurriendo al Arcos se escapa a todo análisis racional. Puede que el mismo Juan Pedro Ramos diera con la clave al término del encuentro: “el Arcos es un equipo que viene de una racha muy negativa al que todo le sale mal. Es una circunstancia complicada la que está viviendo al venir de una zona en la que jugaba por la liguilla y ahora se ve ahí abajo. Tiene que romper esa dinámica negativa para recuperar la confianza y que los jugadores den todo lo que tienen dentro”.
Del partido apenas habría que hablar para no caer en la desesperación ni en la amargura. Para que tengan idea del bochorno padecido, nos podemos acordar de la segunda parte de Gerena o del partido ante el Sanluqueño en El Palmar, por poner dos ejemplos claros de ineficacia e impotencia de un Arcos que no se encontró a sí mismo en ningún momento del partido. Algún amago de querer ir a por el partido -inicios de la primera y segunda parte- con opciones para Antonio Sánchez y Prieto, y poco más, que es como no contar nada porque el resto del partido es de lo peor que ha hecho el Arcos este año.

“Tenemos lo que nos merecemos” (Zona mixta, Mariano Suárez. Entrenador del Arcos C.F.)
“Muy amargo el trago de hoy, sobre todo en la segunda parte. En la primera, el partido estuvo dividido aunque ellos empezaron a ganarnos en intensidad, pero en la segunda parte mi equipo tiene pocas excusas y hemos estado muy mal, bajando los brazos y cometiendo errores groseros. Mis jugadores saben lo que han hecho y me voy muy disgustado y con muy malas sensaciones. Hemos tirado un partido en el que con 1-0 tuvimos un par de ocasiones de gol en la primera parte y Prieto al comienzo de la segunda, en una vaselina para poder empatar, pero el equipo se ha ido. Es algo que no entiendo y que los jugadores lo saben. No los puedo defender porque en la segunda parte hemos estado muy mal. Tenemos 41 puntos y tenemos que ganar un partido para llegar a los 44. Hemos entrenado todos los días de la semana menos uno y metimos un partidillo el miércoles para recuperar sensaciones competitivas y todo estaba hablado, pero tenemos lo que nos merecemos. Hay un montón de horas de trabajo detrás y todo se tira por tierra en la segunda mitad. Me gustaría que algunos jugadores se sentaran aquí y dieran explicaciones porque siempre soy yo el que da la cara. Me habré equivocado en algunos partidos pero los jugadores saben que son los culpables esta vez”.

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