El titular del juzgado de lo penal 10 de Sevilla ha condenado a tres años y tres meses de prisión al conductor que hacer ahora un año atropelló mortalmente a un ciclista en Sevilla tras saltarse un semáforo y que dio positivo en las pruebas de alcohol y drogas.
En una sentencia a la que ha tenido acceso Efe, el juez considera probado que sobre las 8.15 horas del 4 de diciembre de 2016 el acusado, R.M.P. "circulaba en a Avenida Montesierra en dirección a la calle Utrera Molina tras haber ingerido bebidas alcohólicas y sustancias estupefacientes como cocaína, hachís, mda y mdma, factores ambos que le imposibilitaban para una normal conducción".
Según la sentencia circulaba "a velocidad inadecuada" y por esta razón y "a consecuencia de su estado, con notoria negligencia, no se percató de un semáforo en rojo" que precedía a un paso de peatones y ciclistas, que en ese momento cruzó en bicicleta la víctima, "golpeándole con gran violencia y desplzándole unos metros desde el punto del impacto".
Este golpe lo que provocó un fuerte golpe en la cabeza al ciclista y heridas por las que tuvo que ser trasladado al hospital, donde falleció horas más tarde.
En el juicio, celebrado el 30 de junio, el acusado -detenido el mismo día del atropello y en prisión preventiva desde entonces- reconoció los hechos y se mostró conforme con la pena solicitada por la Fiscalía y la acusación particular por sendos delitos de homicidio por imprudencia grave y contra la seguridad vial.
En base a este acuerdo y a la circunstancia atenuante de reparación del daño, ya que la aseguradora del acusado indemnizó a la familia de la víctima -casado y con dos hijos menores- con un total de 588.700,50 euros en concepto de responsabilidad civil, el juez le ha impuesto una pena de tres años y tres meses de cárcel (de la que se descuenta el tiempo pasado en prisión preventiva pero denegando su suspensión) y cuatro años y nueve meses de retirada del carné de conducir.
La sentencia recoge que en el momento del accidente, según los análisis que le fueron practicados, el acusado presentaba 0,46 miligramos de alcohol aspirado por litro de sangre en el primer test y 0,53 en el segundo, lo que según la acusación, ejercida por Daniel Nevado, indica que la última copa la tomó poco antes del atropello, de ahí que aún subiera su nivel de alcohol tras el siniestro.
Los análisis toxicológicos dieron positivo en cocaína, cannabis y éxtasis, "unos niveles de alcohol y drogas demoledores" para el letrado.
"Presentaba fuerte halitosis alcohólica, ojos muy vidriososo y estado de somnolencia", recoge el fallo judicial, dictado tras el juicio pero que la familia de la víctima ha querido hacer público ahora al cumplirse un año de la muerte de Francisco Javier Cabeza Blanco, que contaba 37 años y era muy conocido en el mundo de los aficionados al ciclismo porque organizaba en la localidad sevillana de Guadalcanal una prueba conocida como La Capitana.
Su viuda promueve una campaña para elevar las penas máximas por atropellos mortales a ciclistas de los cuatro años de prisión actuales hasta nueve.